No sé si será por el calor que, al fin, ha llegado a Ibiza pero hoy me siento muy romántica. Os quería contar la bellísima historia de amor de mi tia Mercedes y mi tio Gerardo. Tía Mercedes era la hermana mayor de mi madre. Una mujer bellísima, alta, con un cuerpo bien redondeado (o sea, con curvas) facciones perfectas, una boca preciosa con una dentadura deslumbrante y piernas fabulosas. La verdad es que ella y mi tio Rafael (los dos mayores) fueron los más guapos de la familia, porque mi madre y mi tio Pacho eran ya más corrientitos. A mi tio Rafael le llamaban el "Rodolfo Valentino" de la época (los jovenes buscar en Google). Bueno, la historia comienza cuando mi tia tenía 14 años, iba al colegio francés de Fuenterrabía de monjas (que luego llamamos del "Dispensario") con los cachirulos almidonados y puntiagudos. Tenía unas trenzas larguísimas de unos 10 cm. de grosor (esas trenzas ya no existen, no sé porque...). Cuando salía del colegio se empezó a fijar que un hombre muy guaperas la miraba desde el otro lado de la acera. Pasaron los meses, él siempre estaba ahí observándola, ella se fijó en él. Ya cuando cumplió los 15, él (de unos 20 años) la seguía esperando a la salida del colegio y ya se atrevió a coger el mismo tranvía que ella para regresar a Irún. Continuaron mirándose, sin decir palabra. Cumplió los 16, ya se empezaron a hablar. A los 17 se dieron el primer beso y a los 19 se casaron. Pero el dia antes de la boda, tio Gerardo tenía que haber ido a ver a tia Mercedes a una cierta hora pero se retrasó por alguna razón (estaría tomando chatos con sus amigos) y apareció tarde. Cuando llamó a la puerta, mi tia le dijo, muy airada "Usted ¿quién es? a Usted no le conozco..." y le cerró la puerta en sus narices. Pero se casaron. Tía Mercedes me contó que la primera noche fue muy, muy tierna. Luego pasaron las de Caín porque tio Gerardo fue concejal republicano del ayuntamiento de Irún y cuando la guerra civil estuvo preso (ocho años) y a punto estuvieron de fusilarle. Tía Mercedes tambien estuvo presa por ser su mujer. Ella se pasó el tiempo tricotándole jerseys... Se quisieron toda la vida. Cuando yo era pequeña, me encantaba cuando venían de Barcelona a pasar los veranos en Gainchurizqueta, y recuerdo cuando tio Gerardo, le cogía en brazos a tia Mercedes para llevarla a sus aposentos en el piso de arriba del caserío...
I don't know if it's because the hot weather has, finally, arrived in Ibiza but I feel very romantic... I want to tell you about the fabulous love story between my aunt Mercedes and my uncle Gerard. My aunt Mercedes was my mother's oldest sister. She was VERY beautiful, gorgeous face, beautiful teeth, tall, round-shaped body and great legs. As a matter of fact my grandmother's two oldest children, Mercedes and Rafael were very, very beautiful/handsome. My uncle was considered the "Rodolfo Valentino" of the time (young ones look into Google) whereas my mother and uncle Pacho were more run-of-the-mill type. Well, the story begins when my aunt was fourteen-years-old. She went to the French school in Fuenterrabia run by nuns who wore the starched-pointed headgear. My aunt had long, 10cm wide, braids (they don't exist anymore, I wonder why...). Whenever she finished school and came out she began to notice that a very handsome young man watched her from the other side of the lane... the months went by and HE was always there, just looking at her. She noticed him. When she was fifteen, (he was about twenty) he still stood waiting until she came out from school and started taking the same streetcar that she took to go to Irún. They kept looking at eachother without saying a word. When she was sixteen, they started to talk. When she was seventeen, they kissed. When she was nineteen, they got married. However, the day before the wedding, uncle Gerard had to go and see aunt Mercedes at a certain time but he didn't show up (I suppose he was having a few drinks with his friends) when he did show up my aunt very haughtily said "Who are you? I don't know WHO you are!" and slammed the door in his face. But they got married. Aunt Mercedes told me that their first night together was very, very tender. Afterwards, they went through very rough times. My uncle was a politician in the local Republican government of Irún and was made prisonner during the Spanish Civil War (eight years) and was about to be killed. My aunt was also imprisonned because she was his wife. She spent her time knitting sweaters for him... they loved eachother all their life. I still remember when I was a child in Gainchurizqueta and they came from Barcelona to spend the summer and uncle Gerard would pick up my aunt in his arms to take her up to the bedrooom upstairs...
Qué historia de amor más bella, en efecto, Merche. Vaya familia la tuya. Besos.
ResponderEliminar:)
ResponderEliminarQue preciosidad de historia.
Besos.
Cada ser humano tiene una historia romántica detrás de sí. Las vivencias de la juventud suelen deparar experiencias infinitas de relaciones que se abren y se cierran como la rosa del azafrán. Dejan huellas en las vidas y nunca la memoria prescinde de ellas cuando la vida se estabiliza y miramos al futuro con la perspectiva ilusionante que nos legó la juventud. La historia que cuentas es hermosa y, como tantas otras que has contado de tu familia, debiera ser llevada a la autobiografía, o quizá novelada, con la seguridad de que interesaría al séptimo arte. Me imagino las escenas que describes en la España de comienzos de siglo. A la sombra de una sombrilla de encaje y seda, como dice la canción. Una pareja joven que se enamora y se casa joven y que mutuamente forman una simbiosis que les llevará a indentificarse por completo. Gente de la clase media euskalduna, gente liberal, amiga de lo francés, aficionada a pasear por La Concha y a tomar chocolate con picatostes en El Bulevard, subiendo de vez en cuando a Igueldo a apreciar ese marco incomparable y a darse un furtivo o pasional beso frente a la Isla de Santa Clara. Vendrá la guerra y la oscuridad se cernirá sobre Donostia y sus alredores. Tiempos sórdidos los del dictador en los veranos de Ayete. Pero tus tíos fraguaron su amor en tiempos de libertad, que la ignominia franquista no consiguió derretir. Un fuerte abrazo.
ResponderEliminarPEDRO, sí fue una historia muy bella. Me hubiera gustado ser mi tia... Besotes, M.
ResponderEliminarTOROSALVAJE, me alegro de que te haya gustado. Besotes, M.
FERNANDO MANERO, ¡qué precioso lo que has dicho! Que preciosidad de descripción de una época, un ambiente el del Donosti antes de la guerra con su chocolate y picatostes. Precioso. Me has conmovido. Gracias, Fernando. Besotes, M.
Esas son las historias que me gustan escuchar!!... Queremos más amor!!... basta de historias odiosas y violentas!...
ResponderEliminar¡Ja,ja,ja! A mí lo que me ha encantado es la frase: "los jóvenes buscar en Google". You made my day, como dicen los irlandeses. Esa frase ha estado genial.
ResponderEliminarEn cuanto a la historia de amor... vaya, vaya, les costó un poquito arrancar, tanto mirarse y tal, pero sin hablarse. Sin embargo, parece que luego la cosa fue por muy buen camino.
Yo, reconozco que soy una romántica total. Me encantan las historias de amor, pero sin empalago.Con buen rollo, me encnata el amor.
ResponderEliminarAy qué pena tengo Merche, voy a mandarte un correo ahora mismo.
Un beso fuerte, perdona por escribir menos,ando liada y me temo que ahora con el buen tiempo, menos.
un besote, un besote.
Muchas gracias Merche por la entrada de recomendación.
ResponderEliminarUn abrazo cariñoso y muchas gracias.
Lo de las trenzas sí es curioso, tampoco hay ya esas tías tan flamencorras de buenas curvas.
ResponderEliminarSería por la leche de la montaña
CHUQUIS, la de mis padres tambien tiene su miga. Un dia de éstos, la cuento. Besotes, M.
ResponderEliminarAMELCHE, creo que bastantes de los romances antiguos eran así. Besotes, M.
PILAR, tranquila, mujer. Sí que me gustaría que me contestaras a mi último e-mail... Besotes, M.
DARGOR, de nada. Me alegro de que se haya abierto un debate interesante y necesario. Besotes, M.
BIPO sí sería, sin duda. Besotes, M.
GRACIAS A TODOS
Merche,¡qué historia tan bonita!
ResponderEliminarRecuerdo haber leído un libro, de jovencita: Edad prohibida, ambientado en San Sebastián. Describe los paisajes, las niñas del colegio de monjas peinadas con trenzas y un paseo con tamarindos. Las niñas salían de paseo con las nannys y los chicos las miraban a hurtadillas.
Tienes que contarnos más cosas de esta pareja de enamorados. Y también ponerles rostro. Sube alguna foto.
Besitos
ANTONIA sube la foto... sí, esperaré a que llegue mi hija en julio porque no quiero pasar de nuevo por lo que pasé subiendo la última... Besotes, M.
ResponderEliminarVamos...¡¡¡¡ como ahora...primero se acuestan y luego se piden el teléfono...una historia tierna...
ResponderEliminarsaludos
TUCCI, ja,ja tienes razón. La verdad es que antes todo era más romántico y, quizá por eso las relaciones duraban toda la vida. Besotes, M.
ResponderEliminarPrecioso leerte y recorrer contigo esos tiempos pasados.
ResponderEliminarSaludos
ABUELA CIBER, gracias de nuevo por tu comentario. Sí, es bonito recordar el pasado... Besotes, M.
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