Siento disentir con Khalil, las cadenas que nos impiden ser libres del todo se forjan día a día cuando asumimos compromisos con los padres, con los hijos, con una pareja, con una hipoteca, con una causa... Y a veces son muy pesadas y te dan ganas de romperlas todas, coger una pequeña maleta, subir a un tren y no parar hasta la estación término, da igual a dónde sea. El otro día lo comentaba y una amiga me dijo que ella también se venía. No sé, puede que un día de estos lo haga o puede que siga buscando en las fuentes de la paciencia infinita. Menos mal que tenemos la imaginación. Sólo de pensarlo me siento menos agobiada. Besos y feliz tour.
El hombre infinitamente libre es también infinitamente egoísta e irresponsable. La responsabilidad no debiera vivirse como una carga, la carga es la cadena, no la responsabilidad.
La libertad bien entendida implica - según y mi propio decálogo - amor, cuidado y respeto, por uno y por el otro. A veces, es difícil encontrar un equilibrio entre uno y todos los otros que nos son significativos, pero solo a veces.
Yo creo que no se puede ser libre al 100% a no ser que nos aisláramos en una burbuja desconectados del mundo. Mientras estemos en este mundo siempre habrá algún tipo de condicionante que en mayor o menor medida coartará nuestra libertad.
La libertad total no existe y creo que tampoco nos haría felices. Yo también he querido muchas veces ir a la estación a buscar ese tren que dice Antònia, pero a dónde nos llevaría... creo que luego nos visitaría la añoranza, la culpa, el remordimiento, etc, etc. Creo que las cadenas son inevitables e incluso recomendables, eso sí, poco prietas. Buen agosto Merche.
PEDRO, ANTÒNIA, MYRIAM, ASUN, ABEJITA, EL HISTORIADOR, EUPHORBITA, gracias por vuestros comentarios y perdonad que os conteste a todos juntos pero así mato siete pájaros de un tiro (perdonad también por la metáfora...). Creo que en esta frase Khalil, como vivió en los USA, más bien se refería, cuando habla de las cadenas, al consumismo desaforado de los habitantes de ese país que ya existía en su época y, claro, tanto presumir de libertad pero, en el fondo, estaban "enamorados" de sus cadenas. Por lo menos es como yo he entendido su frase.
Estoy de acuerdo con vuestras opiniones. Para ser libres hay que ser responsables y siempre habrá cadenas que nos aten de una manera u otra. Besotes, M.
Si es encadenarte estar pegada a las personas que quieres, sí, esas cadenas nos gustan. Pero hay una libertad de pensar, de sentir a la que no hay necesidad de renunciar.
HOY, SÁBADO, HE QUERIDO CAMBIAR EL TÍTULO DEL POST PORQUE YA NO ES "DEL DÍA" SINO DE LA SEMANA PERO CON ESTE NUEVO FORMATO DE BLOGGER NO HE PODIDO HACERLO CORRECTAMENTE POR ESO SALE AL FINAL "OUGHT FOR THE DAY" QUE ¡¡NO PUDE BORRAR!! ÉSTO ME PONE DE LOS NERVIOS...
Es que además cari, el amor es la peor de las cadenas.... así que amar las cadenas no deja de ser un redundancia... Y la libertad? pues no sé, pero hoy por hoy ya sabemos que es imposible.
Bezos, cari. Y que sepas que tampoco ando tanto por FB, no creas, eh, jaja
THIAGO, el amor, depende, puede ser la peor cadena o la mejor... Y la libertad yo sí creo que existe aunque hay que romper muchas cadenas para conseguirla. Yo también voy entrando más en FB últimamente ya que los blogs andan de capa caida... Muchos besotes, M.
19 comentarios:
Somos así, desgraciadamente. Ejercer la libertad tiene otra cara de la moneda: la responsabilidad. Nadie la quiere. O muy pocos.
Besos.
Siento disentir con Khalil, las cadenas que nos impiden ser libres del todo se forjan día a día cuando asumimos compromisos con los padres, con los hijos, con una pareja, con una hipoteca, con una causa... Y a veces son muy pesadas y te dan ganas de romperlas todas, coger una pequeña maleta, subir a un tren y no parar hasta la estación término, da igual a dónde sea.
El otro día lo comentaba y una amiga me dijo que ella también se venía. No sé, puede que un día de estos lo haga o puede que siga buscando en las fuentes de la paciencia infinita.
Menos mal que tenemos la imaginación. Sólo de pensarlo me siento menos agobiada.
Besos y feliz tour.
El hombre infinitamente libre es también infinitamente egoísta e irresponsable. La responsabilidad no debiera vivirse como una carga, la carga es la cadena, no la responsabilidad.
La libertad bien entendida implica - según y mi propio decálogo - amor, cuidado y respeto, por uno y por el otro. A veces, es difícil encontrar un equilibrio entre uno y todos los otros que nos son significativos, pero solo a veces.
Besos
Yo creo que no se puede ser libre al 100% a no ser que nos aisláramos en una burbuja desconectados del mundo. Mientras estemos en este mundo siempre habrá algún tipo de condicionante que en mayor o menor medida coartará nuestra libertad.
Un beso, Merchita.
Somos así.
Besos Merche
Nos gusta sufrir... O entonces no lo entiendo
La libertad total no existe y creo que tampoco nos haría felices.
Yo también he querido muchas veces ir a la estación a buscar ese tren que dice Antònia, pero a dónde nos llevaría... creo que luego nos visitaría la añoranza, la culpa, el remordimiento, etc, etc.
Creo que las cadenas son inevitables e incluso recomendables, eso sí, poco prietas.
Buen agosto Merche.
PEDRO, ANTÒNIA, MYRIAM, ASUN, ABEJITA, EL HISTORIADOR, EUPHORBITA, gracias por vuestros comentarios y perdonad que os conteste a todos juntos pero así mato siete pájaros de un tiro (perdonad también por la metáfora...). Creo que en esta frase Khalil, como vivió en los USA, más bien se refería, cuando habla de las cadenas, al consumismo desaforado de los habitantes de ese país que ya existía en su época y, claro, tanto presumir de libertad pero, en el fondo, estaban "enamorados" de sus cadenas. Por lo menos es como yo he entendido su frase.
Estoy de acuerdo con vuestras opiniones. Para ser libres hay que ser responsables y siempre habrá cadenas que nos aten de una manera u otra. Besotes, M.
Es que las cadenas son tan seguras!
Si es encadenarte estar pegada a las personas que quieres, sí, esas cadenas nos gustan. Pero hay una libertad de pensar, de sentir a la que no hay necesidad de renunciar.
Supongo que es una frase muy cierta.
MARCELO, a veces, sí... Besotes, M.
CECI, ¡Exactamente! Ahí, en el pensar, imaginar, sentir es donde yace la verdadera libertad, querida. Besotes, M.
AMELCHE ¿Ya has vuelto de Escocia? Besotes, M.
HOY, SÁBADO, HE QUERIDO CAMBIAR EL TÍTULO DEL POST PORQUE YA NO ES "DEL DÍA" SINO DE LA SEMANA PERO CON ESTE NUEVO FORMATO DE BLOGGER NO HE PODIDO HACERLO CORRECTAMENTE POR ESO SALE AL FINAL "OUGHT FOR THE DAY" QUE ¡¡NO PUDE BORRAR!! ÉSTO ME PONE DE LOS NERVIOS...
Es que además cari, el amor es la peor de las cadenas.... así que amar las cadenas no deja de ser un redundancia... Y la libertad? pues no sé, pero hoy por hoy ya sabemos que es imposible.
Bezos, cari. Y que sepas que tampoco ando tanto por FB, no creas, eh, jaja
THIAGO, el amor, depende, puede ser la peor cadena o la mejor... Y la libertad yo sí creo que existe aunque hay que romper muchas cadenas para conseguirla.
Yo también voy entrando más en FB últimamente ya que los blogs andan de capa caida... Muchos besotes, M.
GRACIAS MIS QUERIDOS
Soñar cuesta poco
PACO, sí, tan poco... Besotes, M.
¡que contradición!
¡pero que gran verdad!
biquiños,
dimelo a mi!! jajajaj
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