"Los Larrabeiti les recibieron en su casa de Passy, una mansión anticuada, pero grande y muy lujosa, y, sobre todo, admirablemente situada en la rue Renoir. Enfrente, al otro lado de la calle, se levantaba una casita, una especie de pequeño palacete, que había sido la morada de Balzac durante muchos años y en la que éste había escrito treinta y seis de sus novelas. Por ese motivo había escapado de las garras de los contratistas (nota mia: especuladores inmobiliarios...) que habrían destruido la casita para construir en su magnífico solar un edificio de muchos pisos. (Nota mia de nuevo: prueba de que habría que mantener intacta la casa de ALEIXANDRE, nuestro laureado poeta y premio Nobel).
A ambos lados de la casa de Balzac aparecía, cerrado por rejas, un hermoso jardín que bajaba en pronunciada pendiente hasta los muelles del Sena, lo cual hacía de aquella zona un lugar notablemente despejado.
Los eibarreses habían traido consigo a dos sobrinas, pero la casa era grande y, por el momento, había sitio para María y Miguel.
La portera, una mujer muy agradable, era bastante joven, a pesar de tener el pelo completamente blanco. Estaba casada con un inglés altísimo, portero de un gran hotel de lujo. Cuando mister Smith, para ir al trabajo, se ponía el levitón marrón con doble fila de botones dorados y la gorra de plato con galones, resultaba verdaderamente imponente.
Los eibarreses le dijeron a Miguel que en los otros pisos de aquella casa debían de vivir personas de mucha importancia, pero todavía no se habían podido enterar de quiénes eran, pues nunca se les veía..."
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Once in Paris, the Larrabeiti family lodged them for a while in their spacious flat. There was room for them, as well as for the two nieces the family had brought with them to work in the restaurant.
The house was extremely well situated in Passy, in the Rue Renoir. Across the street, there was a small palace-type house where Balzac had lived for many years and had written thirty-six of his novels. Due to this fact, luckily, the house hadn't been destroyed and a block of apartments built in its marvellous site. On both sides of Balzac's house, locked by an iron-grilled gate, there was a sprawling garden that descended all the way to the quays of the Seine. Therefore, the area was devoid of unpleasant views and was quite open and clear.
The "concierge", a young woman although her hair was completely white, was married to an extremely tall Englishman who worked as doorman in a very luxurious hotel. It was a sight to see Mr. Smith go to work in his flashing uniform with his brown frock coat bordered by a double string of golden buttons and his braided dish-shaped cap. He was quite impressive.
The Larrabeitis told my relatives that very important people seemed to live in their building, however, they didn't know who they were as no one had seen them yet.
Mister Smith debía parecer un almirante.
ResponderEliminarComo me gusta la historia.
Besos.
Acabo de entrar y me encuentro con una serie magnífica sobre Paris, sus paisajes y sus gentes. Una parte más de esa saga que deleite, entretiene e ilustra sobre las peripecias de unas gentes que si por algo se significaban era por su buen gusto y por sus ansias de libertad. Voy a empezar desde el primer capítulo para no perder el hilo. Seguro que se descubre otro argumento más sobren el que construir una época que no debe ser olvidada. Un fuerte abrazo
ResponderEliminarNos dejas siempre en el momento de soñar la continuación: ¿quiénes serán las personas misteriosas e importantes que habitan la casa? Imaginemos...
ResponderEliminarBesos.
TORO por lo menos... Besotes, M.
ResponderEliminarFERNANDO ¡Bienvenido de vuelta! Te echaba de menos... Besotes, M.
PEDRO uy, sí, imaginemos... Qué misterio... (continuará--acompañado de música esotérica y trascendente con mucho "tachÍn/tachÁn..."). Besotes, M.
Me llamó la atención la mansión palacete de Balzac.
ResponderEliminar36 novelas escribió allí; eso era escribir. ¿Cuántas escribiría entonces en el total de su vida?.
Un monstruo de las letras, sin duda....
Muy interensantes estos aperitivos parisinos sobre el exilio de tus tíos.
Se nota que esta autobiografía (creo que dijiste un día) del exilio está escrita con un estilo y rigor excelentes. Muy interesante, sí señor (perdón señora).
Cuídate de los chaparrones insulares; ya leí el otro día que la combinación de agua chaparrónica y llevar a los "guiris" a visitar la isla no es buena combinación jajaja.
Un beso para tí, desde mi nuevo cuartel general: cíber-niñoschillones.
Tiene el arte de poner suspense en tus Entregas... Nos tienes enganchados, Merche..
ResponderEliminarHonoré de Balzac un des plus prolifiques...
À la prochaine, ma chérie, plein de bisous!
Continúa muy interesante la historia. Me encanta como describís, por ejemplo la casa, sos genial, Merche!!
ResponderEliminarBESOTES
ANTONIO AGUILERA, no se cuántas novelas escribió Balzac pero fue muy prolífico, de eso no hay ninguna duda. Me alegro de que te gusten las historias de mi tia. Hoy tengo visita a Dalt Vila de nuevo ¡ESPERO QUE NO LLUEVA! Llevo una racha... Besotes viernesanteros, M.
ResponderEliminarSELMITA como le digo a ANTONIO A., Balzac fue MUY prolífico. ¿Sabes cuántas escribió en total?
Ahora en París y con el restaurante, las historias se vuelven más interesantes, ya leerás. Gros bisous pour toi aussi, ma chérie, M.
STANLEY mi querido no soy yo la que escribe, es mi tia, yo simplemente copio del libro que escribió. Muchos besotes, M.
GRACIAS COMO SIEMPRE A TODOS
Sin duda Mr Smith quiso ser policia secreto, pero midiendo 8x8 iba a ser complicado para el, asi que decidió ganarse la vida en un hotel sin duda, y gracias a su imponente físico, espantaría a los indeseables de las puertas del hotel.
ResponderEliminarA mi si me dejan, me escribo un libro sobre el señor Smith, jajaja.
Me gustó tu blog.
Wou!! sigue, sigue!!
ResponderEliminarGenial, nena.
Besotes, guapa!!
MAL BICHO, gracias por tu visita. A mi me huele que Mr. Smith era un espía... En esos años París era un hervidero de agentes secretos... Besotes, M.
ResponderEliminarDIANNITA, sigo, sigo. Besotes, M.
Esto está interesantísimo...
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