En todo pueblo que se precie existen las inevitables cotillas. El otro día conocí a dos. Iba con mi carrito de la compra a coger el autobus para ir al pueblo más grande de la comarca dónde tenía que hacer mis gestiones de jubilata y de paso hacer la compra en el mercado (en mi pueblo no hay, solo tiendas). Subí y piqué mi tarjeta de transporte. Al llegar a mi pueblo, el bus paraba unos quince minutos antes de retomar el trayecto, el conductor me pidió que bajara pudiendo subir de nuevo sin pagar. Es lo que hice, me senté en la parada con mi carrito.
Las cotillas, típicas horteras adictas a los programas basura de la tele, estaban en la cola hablando sandeces entre ellas; no paraban de mirarme, (supongo que les chocó que me vistiera a la ibicenca--hippy chic-- y llevara una sombrilla de encaje, que siempre llevo en verano) me hice la sueca y, por supuesto, no les presté la más mínima atención.
Al retomar el trayecto, como la puerta trasera estaba abierta, avisando al chófer, subí con mi carrito y me acomodé en los asientos detrás de la puerta. Las cotillas entraron por la puerta delantera, una hizo ademán de querer sentarse en mi asiento (y eso que el bus estaba prácticamente vacío...) pero vió el carrito. Enfurruñada, ella y su amiga se sentaron justo al lado. Empezaron a cuchichear que si no había picado la tarjeta..., qué suerte teníamos algunas..., qué caradura..., y patatín, patatán. Las ignoré.
En fin, ya las tengo fichadas. Espero no encontrármelas a menudo porque lo que más odio en esta vida son los cotilleos de tres al cuarto y de criticar sin saber de qué se habla.
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In all towns there are the inevitable gossips. The other day I met two. I was going with my shopping cart to the largest town of the area, to do my retiree papers and to shop at the market (in my village we don't have one, only shops). I got on the bus, ticking my travel card. When we reached my village, the bus stopped for fifteen minutes before retaking the route. The driver asked me to come down saying that I could get back on without paying. That's what I did. I sat down on the bench with my shopping trolley. In the queue, there were two gossips, typical tacky women addicted to cheap TV talk shows, speaking inanely, who kept looking at me (I suppose they were shocked because I dress very Ibizan style--hippy chic--and carry a lace parasol in the summer). Of course, I didn't pay any attention to them.
When we retook the trip and, as the back door was open, advising the driver, I got in with my cart and sat on the seats behind the door. The gossips went through the front door. One of them tried to sit where I was (even though the bus was practically empty...) but she saw the trolley. Frowning, she and her friend sat next to me. They started whispering that I hadn't ticked my card..., how lucky some were..., that we got away with murder..., etc., etc. I ignored them.
Now I know who they are and hope I don't run into them again because if there is anything I hate in this life is stupid, silly gossip, especially gabbing and criticizing without the slightest idea of what they're talking about.
29 comentarios:
Merche, pasa de ellas, tú a lo tuyo.
Un abrazo
Que asco de personas.
Que más les dará la vida de las otras personas.
Comprendo que su vida sea una mierda y que por eso intenten huir de del estercolero que es su día a día, pero lo podrían hacer leyendo o mejor aún tirándose por un barranco.
Que gentuza.
Besos y no hagas caso a esos mandriles.
I also hate receiving sun rays directly on my head. I only wear a cap to protect from them.
What a funny bus! It has breaks before arriving at the end of the route.
Typical situation when concerning just arrived. Don't worry, they'll get accustomed, it happens everywhere.
Hugs
¡¡Ay, las cotillas -y los "cotillos", que los hay-, qué pobre vida tienen si dependen de la vida de los demás!!
Veo que te vas haciendo al terreno...
Besos.
En esos casos, Merche querida, ¡qué bien viene hacerse el sueco! ¿no?
Besos y suerte con las cotilleras.
Pura envidia. No hay más que hablar. Te vieron con la modernidad en el porte, con la sombrilla, con el donaire, con el estilo lo más alejado posible del paletismo... y se fijaron en ti. De haberte mostrado como las del terruño, hubieras pasado desapercibida. No son cotillas, son unas mujeres aburridas y simplemente envidiosas, aunque, como bien es sabido, la envidia sólo hace daño a quien la tiene. Que con su pan y su miseria se lo coman. No pierdas nunca la imagen que te distingue. Un abrazo, Merche
uf los pueblos son terribles, sí. Que tías, si supieran de la misa a la media se meterían la lengua donde yo me sé...siepre me dan ganas de decirles lo que se merecen, pero por educación uno trata de pasar
si llevabas tu sombrillita no me extraña que les cochara jejej.
Dejalas que se diviertan, yo me rio cuando puedo hacerles hablar.
un abrazo muy fuerte merche!
se te echa de menos aunque nos viesemos poco, todavia voy mirando los autobuses instintivamente por si eres la guia... :-(
No creo que vaya a ser tan fácil que te desprendas de ese par de cacatúas, hasta que no sepan más cosas sobre vos!
BESOTES DIOSA Y HASTA MAÑANA!
Me imaginno haciéndote la sueca...jajajajajaja
La próxima vez háblales en un idioma irreproducible, tal vez se animen a decir bararidades en voz alta creyendo que no las entenderás!
Un beso
KETY, por supuesto que paso pero me ha servido para escribir este post. No hay mal que por bien no venga, como diría Sancho... Besotes, M.
TORO, me he reido con tu comentario. Y, no, seguro que no han leído un libro en su triste vida... Besotes, M.
PANCHO, it would be a bit weird if you carried a parasol! I'm sure the cap protects you from the sun rays. The bus, apparently, takes a rest in my town before continuing. Yes, if they see me again, they'll get used to it... Besotes, M.
PEDRO, sí, me voy haciendo al terreno... La mayoría de la gente es MUY amable pero, en todos sitios, hay manzanas podridas ¡qué le vamos a hacer! Besotes, M.
MYRIAM, cuando dije eso de hacerme la sueca, te juro, ¡que pensé en tí! Estuve a punto de poner (perdona, Myriam...). Besotes, M.
FERNANDO, sí que envidiosillas eran, sí. Además buscaban bronca pero, como diria Sancho, "el mayor desprecio es no hacer aprecio". Lema que sigo a rajatabla con la gente que no me interesa y no me va a aportar nada nuevo bajo el sol. Gracias por tus piropos. Besotes, M.
DIDAC, y eso que este pueblo no es de esos de mala muerte, no, es precioso con gente muy educada y progre pero éstas eran unas simples chabacanas ignorantes. Igual ni eran del pueblo, ahora que lo pienso... Lo más seguro que eran del grande (más industrial) a donde nos dirigíamos. Besotes, M.
METIS, seguro que alucinaron con mi sombrilla, sí. Pero a mi plín, me protege del sol y eso es lo importante. Hay varias que me han preguntado dónde la he comprado, les digo que en Ibiza (seguro que van para allí este verano...) y ¡no la encontrarán! Porque, como sabes, la compré en Londres...qué mala soy... pero es que es para que vayan a la illa...
¡Qué mona mirando a los autobuses a ver si me ves! Me ha llegado al alma, querida METIS. Por cierto, sigo sin poder entrar en tu nuevo blog. Besotes, M.
STANLEY, no creo que las vuelva a ver porque mi pueblo es bastante grande (10.000 habitantes) además, como le digo a DIDAC seguro que serían del otro más grande a donde nos dirigíamos. Besotes, M.
MARCELO, a ese tipo de víboras, es mejor ignorarlas que es lo que hice. Ahora voy a ver si me pongo al dia con tus posts, querido. Besotes, M.
GRACIAS MIS QUERIDOS
Seguro que se picaron porque no les hablaste y no pudieron enterarse de tu vida. :-)
Mama, a veces desearia que te pusieses una pamela en lugar de la sombrilla, pero claro, la sombrilla es mas fresquita...ya veras como acabamos viendo mogollon de mujeres con sombrillas al cabo de unos anyos por tu zona. Me parecio ver algunas con sombrilla en Ibiza no? En China, al menos en Beijing, lo normal es utilizar los paraguas como sombrillas cuando hace calor. Tiene sentido! besos, Chipi
Ay MERCHE, cuando así le dices que es que no has pagado porque el chófer es tu amante y te deja subir gratis jajajajaja. Entonces sí que pondrían cara rara.
Besos
AMELCHE, pues se van a quedar con las ganas porque, como comprenderás, a esas zafias no les iba a contar mi vida... Besotes, M.
MI AMOR, figúrate que en Ibiza antiguamente todas llevaban paraguas en verano pero últimamente nadie llevaba nada. También yo era la única del barrio con una sombrilla que, como tu sabes, me venía muy bien para guíar a mis turistas (mataba dos pájaros de un tiro). No sé si dentro de unos años se verán más pero juzgando de cuando pinté mi bici de blanco en Ibiza ¿te acuerdas cuando te iba a buscar al cole en bici? y a los pocos años hubo proliferación de bicis blancas... Seguro que pasará lo mismo con la sombrilla. Y lo de las pamelas, sabes que tengo colección de ellas que ahora uso de decoración porque me dan mucho calor. La sombrilla es la mejor solución, mi vidita. Gracias por tu comentario. Besotes, M.
ASUN, tu comentario llegó despues de mis contestaciones a AMELCHE y a mi hija. Seguro que si les llego a decir eso ¡flipan en colores! Ja,ja,ja... Besotes, M.
Esta es una plaga que se dá en muchos lugares. Pueblos sobretodo. Con ignorarlas, te vale. Saludos amiga. quizás necesites algún consejo de una paisana de tus cotillas. Ya sabes donde llamar.
jaj cari es verdad que siempre hay de esas, y que son temibles cuando van de dos en dos, pero de una en una (como los malos de la pelis, nunca atacan, ajaj).
Me encanta tu descripción de ti misma, ajaj hipie chic con sombrilla de encaje. Eres la maripopins del siglo XXI jajaa
Bezos, cari.
Mi Señora Merche,
Lamentablemente yo no podría tirar la primera piedra contra las cotillas, de hecho no tiraría ninguna.
Yo abalconado soy el mayor cotilla de blogosfera y en Internet eso para mí, es la sal entre tanta letra sosa.
Tampoco le podría dar un consejo porque yo nunca llevé una sombrilla de encaje, solo las puñetas de mi camisa, ni voy vestido de hippy chic sino con sombrero, capa y en raso negro.
Pero mi primera acción hubiese sido ser galante, cederle mi sitio y mis brazos a las dos cotillas y haberme sin dudarlo introducido en los gossip de su pueblo por el camino más rápido.
Resumiendo, como no podrá vencerlas ni ignorarlas al menos sea la líder y luego nos cuenta, qué estaremos deseando ;-)
Besos honestos y deshonestos mi Señora, Z+-----
MONTSERRAT, las cotillas no eran catalanas. De todas formas sé que hay de todo en la viña del señor... Gracias por tu ayuda. Besotes, M.
THIAGO, ¡Ojalá! fuera Mary Poppins y pudiera volar con mi sombrilla en vez de tener que coger el autobus... Eso, sí, ¡que sería tema de cotilleo! Besotes, M.
SEÑOR DE LA VEGA, ¡Gracias por su comentario! Ya sabe que siempre es un placer y una alegría que vuesa merced aparezca por mi balcón. O sea que ¿es un cotilla? Bueno, no crea, a mi también me gustan los cotilleos jugosos pero no, como digo en mi post, los de tres al cuarto: que si Belén Esteban, Jesulín y los de esa ralea.
Gracias por sus besos, creo que prefiero los deshonestos... Besotes como a vuesa merced le gusten, M.
Foto con sombrilla, ya.
Cotillas y cotillos, plaga universal.
Besos
MERCHE: Si no la tienes, te mando la foto con sombrilla que te hizo Metis el verano pasado, creo que Abejita tiene razón: se impone publicarla. :-D (Simbolito de risas, que ya sé que no te gustan mucho estos símbolos que no entiendes.)
Si la tienes publicada en el blog, aunque creo que Metis te hizo una más de cerca en la que se veía mejor la sombrilla. Ladies and gentlemen, fans de Merche y cotillas que puedan entrar en su blog, he aquí una foto de Merche con sombrilla, pinchad aquí.
¡Gracias Amelche! ¡eso es! hay que descubrir el lado más cotilla más curioso y humano, por supuesto, si se puede con clase y en mi caso ni eso, por ser siempre irreverente, descastado y desclasado.
No recordaba yo esas fotos (memoria no tengo, solo disco duro y cloud computing), que ahora sí, nos permite comprender a las señoras del pueblo frente a la inmaculada presencia de mi Señora Merche y su sombrilla apuntillada.
O bien la condenan o la empiezan a venerar como a la nueva virgen del Sol y de sus Lunas.
Las fotos publicadas, pinchando se agrandan aún un poco más, y yo como mi curiosidad no ceja, no consigo leer en los pechos de Ametis el nombre de los zurdos o dejar de mirar deshonestamente en el escote de mi preferida jubilada el seno en la ensenada.
¡Quién fuese gaviota en las playas de Ibiza con agudeza de quebrantahuesos!
Gracias, besos y Suyo, Z+-----
SEÑOR DE LA VEGA: ¡Ja, ja, ja! Veo que ha disfrutado usted mucho de las fotos y las ha analizado hasta el mínimo detalle. Entre los zurdos famosos que menciona la camiseta de Metis, está ella misma (al final pone "yo").
ABEJITA, AMELCHE ya ha linkeado algunas fotos que publiqué el año pasado. La diferencia es que ahora ya no me tiño el pelo, lo tengo plateado por no decir blanco... En una se me ve con la sombrilla. Y, sí, cotillas y cotillos hay a porrillo... Besotes, M.
AMELCHE, ¡gracias por hacerme el favor de linkear las fotos! Yo, aún no sé hacer eso pero es una asignatura que tengo pendiente... Trataré de acordarme que :-D son risas... Besotes, M.
SEÑOR DE LA VEGA ¡Menos mal que no es un quebrantahuesos! Mire que en esa foto se me ve un pecho tan chuchurrío y esmirriado...(bueno, verá que no me he operado). La verdad es que me he visto más jóven en esas fotos de lo que estoy en la actualidad pues me he dejado el pelo blanco y, la verdad es que avejenta, pero ¡estoy tan cómoda! que me importa un pepino. Siempre a sus pies, M.
AMELCHE, acabo de leer tu comentario al SEÑOR DE LA VEGA la verdad que curioso y cotilla es...Uyyy. Gracias por explicarle lo de la camiseta de los zurdos que a mi se me olvidó. Besotes, M.
¡Ay Merche! Y tendrás suerte si sólo son dos.
Como dice Fernando: una buena cosa es ignorarlas o si te pillan a contrapie darles un buen corte.
Ahora no puedo comentar tanto, con dos saharauillos en casa, las lavadoras se acumulan y me paso la mañana en la cocina. Y algún ratito en FB. Además hace un calor tan espantoso que me quita la enrgía. Hace unos días fuimos a Lleida y tuvimos que esperar en un semáforo a pleno sol. Me hubiera venido de perlas una sombrilla.
Y hoy también hemos estado en Lleida. Eran las siete y el asfalto parecía una estufa.
Un beso fuerte.
Quizás les tenías que haber dejado un hueco al lado para decirles que eres representante de sombrillas y que el Ayuntamiento te ofrece un servicio gratuito de transporte porque la sombrillas son genuinas de allí.
-Pues no sabíamos. ¿Nos puede vender una?
-Lo siento, sólo trabajamos el mercado internacional.
Jejejejej
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