"Los padres de familia empezaban a preocuparse seriamente, pero sus esposas, todo entusiasmo y euforia por la causa, se mostraban cada día más sonrientes y amables con aquella juventud en efervescencia. También solía aparecer en aquellas reuniones, de vez en cuando, algún escritor franquista muy en boga, o periodistas españoles recien llegados del extranjero.
Por la frontera de Irún, cada vez llegaban más refugiados procedentes de Cataluña.
Un dia, los habitantes de Pasajes Ancho (mi nota: hay tres Pasajes cerca de San Sebastían, uno es el mencionado y los otros dos son Pasajes de San Juan y Pasajes de San Pedro) vieron llegar por la carretera a cientos, tal vez miles, de hombres que avanzaban en filas compactas de a seis. Estaban mal vestidos y polvorientos. Algunos venían de campos de concentración franceses. Realmente, Francia no sabía ya qué hacer con todos aquellos españoles que entraban en cataratas por sus fronteras.
Los que llegaban aquel dia a Pasajes, llamaban la atención por el color grisáceo de sus caras. Se decía que era consecuencia de la mala alimentación y, sobre todo, de la falta de grasas. Iban formados en apretadas filas, custodiados por soldados armados, que los dirigían al puerto, donde les esperaba un barco.
Al pasar, las mujeres, compadecidas, les daban cigarrillos, chocolate y galletas. No estaba permitido, pero los soldados se hacían los distraidos, contentándose con dar de vez en cuando un grito, para disimular su tolerancia. Aquella misma tarde, el barco zarpó, no se sabía para dónde".
--------------------------------------------------------------------------------------------------------------
ECHOES OF THE WAR (2)
The family heads were starting to be seriously worried but their wives were enthused and very euphoric with the cause. They were absolutely charmed and very friendly towards that effervescent youth. Sometimes, in those reunions, a famous Franquist writer would appear as well as Spanish journalists who had just arrived from abroad.
Through the Irún border, each day, more refugees mainly from Catalonia, arrived.
One day, the people of Pasajes Ancho (My note: there are three "Pasajes" near San Sebastián, one is the latter and the other two are "Pasajes de San Juan" and "Pasajes de San Pedro"), saw coming on the road, hundreds, or maybe thousands, of men walking in compact files of six. They were straggly-dressed and full of dust. Some came from the French concentration camps. Really, France didn't know what to do with all the Spaniards that flooded in through its frontiers.
Those who arrived in Pasajes that day, surprised everyone by their ashen faces. It was said that it was due to malnutrition and, especially, lack of fat. They were formed in tight files, controled by armed soldiers, who led them to the port where a ship was waiting.
As they passed, the women, feeling sorry for them, gave them cigarettes, chocolate and cookies. It wasn't allowed but the soldiers pretended not to notice shouting from time to time in order to conceal their tolerance. That same afternoon, the ship left. No one knew its destination.
martes, 29 de septiembre de 2009
sábado, 26 de septiembre de 2009
EL ECO DE LA GUERRA (1)
(Sigo sin poder poner fotos... Quería poner una de Robert Capa de los bombardeos de Barcelona pero me ha sido imposible)
"Hacia la Navidad, las noticias de los frentes eran pavorosas. Los aviones franquistas bombardeaban Barcelona, al tiempo que sus barcos cañoneaban las costas catalanas desde el mar. Los republicanos atacaban Teruel, llegando a cercarla. Los nacionales iniciaban una vigorosa acción para romper el cerco y librar a los sitiados, pero, a causa del frío intensísimo y de los temporales, se vieron obligados a detenerse. Los últimos defensores de Teruel se rindieron a los republicanos.
Muy poco despues, cuando mejoró el tiempo, se inició la nueva ofensiva nacional, para la reconquista de esta plaza.
Hacia fines de febrero, en Pasajes, las campanas se echaron al vuelo una vez más y se lanzaron cohetes. La banda de música recorrió las calles, precedida de la chiquillería. Hubo encendidos discursos patrióticos y, con los brazos en alto, se cantó con entusiasmo el "Cara al sol". Teruel había sido reconquistada.
Los combatientes que venían de los frentes eran acogidos en muchas casas de la burguesía de San Sebastián, donde se les obsequiaba con esplendidez. Eran oficiales de marina o del ejército de tierra, marineros, aviadores, soldados rasos, falangistas, requetés, etc. Unos estaban de permiso; otros, convalecientes de heridas recibidas en el frente. A todos se les obsequiaba, se les mimaba. Las bodegas de las casas, que almacenaban reservas para varios años, se iban quedando vacías. El coñac francés fue lo primero en desaparecer. Le siguieron los vinos de marca, el jerez, el champagne... En aquella época, afortunadamente para los bolsillos de los anfitriones, el whisky no era de consumo corriente.
Con estos obsequios continuos y con la imprevista prolongación de la guerra, el presupuesto de las casas aumentaba y los cofres se vaciaban, dado que los negocios tampoco marchaban bien". (Continuará)
-----------------------------------------------------------------------------------------------------------------------
ECHOES OF THE WAR (1)
(I still can't upload pictures... I wanted to put one of the Barcelona bombings by Robert Capa but it's been impossible.)
Nearing Christmas, news from the fronts were terrible. Franco's airforce bombed Barcelona while its marine attacked the Catalonian coasts. The Republicans attacked Teruel, surrounding it. The Nationals (Franco's army) began an intense assault in order to recuperate that post and "liberate" its citizens but due to the intense cold and storms, had to stop. The last defenders of Teruel surrendered to the Republicans.
Very soon, once the weather was better, the new National offensive took place in order to gain this post.
Close to the end of February, in Pasajes, once again, bells chimed and firecrackers exploded. The music band paraded through the streets preceded by the local happily-screaming children. There were fiery patriotic speeches and, with their arms extended, sang the "Cara al sol" (hymn of the Franco regime). Teruel had been reconquered.
The soldiers that returned from the fronts were lodged with many of San Sebastian's bourgeois families where they were splendidly lavished. They were marine or army officials, sailors, pilots, or just simple soldiers. Some were on permission, others convalescent of wounds received in the fronts. They were all welcomed and pampered. The family stocks that had been saved to last for several years, quickly dwindled. Brandy was the first thing that disappeared. Wine, Sherry and Champagne followed. In those times, fortunately for their hosts, whisky was not of common use.
With these continuous gifts, and with the surprisingly-long war, family budgets suffered, their capital decreased. On top of it all, their enterprises weren't going well either. (It will continue)
"Hacia la Navidad, las noticias de los frentes eran pavorosas. Los aviones franquistas bombardeaban Barcelona, al tiempo que sus barcos cañoneaban las costas catalanas desde el mar. Los republicanos atacaban Teruel, llegando a cercarla. Los nacionales iniciaban una vigorosa acción para romper el cerco y librar a los sitiados, pero, a causa del frío intensísimo y de los temporales, se vieron obligados a detenerse. Los últimos defensores de Teruel se rindieron a los republicanos.
Muy poco despues, cuando mejoró el tiempo, se inició la nueva ofensiva nacional, para la reconquista de esta plaza.
Hacia fines de febrero, en Pasajes, las campanas se echaron al vuelo una vez más y se lanzaron cohetes. La banda de música recorrió las calles, precedida de la chiquillería. Hubo encendidos discursos patrióticos y, con los brazos en alto, se cantó con entusiasmo el "Cara al sol". Teruel había sido reconquistada.
Los combatientes que venían de los frentes eran acogidos en muchas casas de la burguesía de San Sebastián, donde se les obsequiaba con esplendidez. Eran oficiales de marina o del ejército de tierra, marineros, aviadores, soldados rasos, falangistas, requetés, etc. Unos estaban de permiso; otros, convalecientes de heridas recibidas en el frente. A todos se les obsequiaba, se les mimaba. Las bodegas de las casas, que almacenaban reservas para varios años, se iban quedando vacías. El coñac francés fue lo primero en desaparecer. Le siguieron los vinos de marca, el jerez, el champagne... En aquella época, afortunadamente para los bolsillos de los anfitriones, el whisky no era de consumo corriente.
Con estos obsequios continuos y con la imprevista prolongación de la guerra, el presupuesto de las casas aumentaba y los cofres se vaciaban, dado que los negocios tampoco marchaban bien". (Continuará)
-----------------------------------------------------------------------------------------------------------------------
ECHOES OF THE WAR (1)
(I still can't upload pictures... I wanted to put one of the Barcelona bombings by Robert Capa but it's been impossible.)
Nearing Christmas, news from the fronts were terrible. Franco's airforce bombed Barcelona while its marine attacked the Catalonian coasts. The Republicans attacked Teruel, surrounding it. The Nationals (Franco's army) began an intense assault in order to recuperate that post and "liberate" its citizens but due to the intense cold and storms, had to stop. The last defenders of Teruel surrendered to the Republicans.
Very soon, once the weather was better, the new National offensive took place in order to gain this post.
Close to the end of February, in Pasajes, once again, bells chimed and firecrackers exploded. The music band paraded through the streets preceded by the local happily-screaming children. There were fiery patriotic speeches and, with their arms extended, sang the "Cara al sol" (hymn of the Franco regime). Teruel had been reconquered.
The soldiers that returned from the fronts were lodged with many of San Sebastian's bourgeois families where they were splendidly lavished. They were marine or army officials, sailors, pilots, or just simple soldiers. Some were on permission, others convalescent of wounds received in the fronts. They were all welcomed and pampered. The family stocks that had been saved to last for several years, quickly dwindled. Brandy was the first thing that disappeared. Wine, Sherry and Champagne followed. In those times, fortunately for their hosts, whisky was not of common use.
With these continuous gifts, and with the surprisingly-long war, family budgets suffered, their capital decreased. On top of it all, their enterprises weren't going well either. (It will continue)
jueves, 24 de septiembre de 2009
FORMAS DE SUPERVIVENCIA Y DE MUERTE (2)
(Perdonad pero ya ni intento subir una foto por ahora...)
"Otro catalán, valiéndose de su horno doméstico, cocía magníficas tortas que su mujer, ataviada con un blanquísimo y amplio delantal con peto, vendía en una mesa del mercado de Rentería. Otros vendían churros y caramelos, tambien de fabricación casera.
Un ingenioso gerundense fabricaba una especie de pequeñas alfombras de goma, que sustituían a los felpudos. Para ello, se valía de neumáticos viejos que recogía en los vertederos de basura. Hacía tiras de los neumáticos y, trenzándolas, obtenía también alfombras. Igualmente fabricaba albarcas con trozos mayores de neumático. Otros vendían esteras hechas con hojas secas de maíz.
Todo era útil en aquella época de penuria generalizada.
Los fabricantes de jabón eran incontables, y vendían su mercancía de casa en casa. Uno de éstos timó a María sin el menor reparo. Le vendió doce hermosos jabones blancos y relucientes, colocados en perfecta alineación en una caja de cartón bien tapada, con la recomendación de que no los usase hasta pasados tres o cuatro dias y, sobre todo, de que no los destapase hasta el momento de tenerlos que usar. Cuando María, a los cuatro dias, abrió la caja para usar un jabón, se encontró con doce "escupitajos" (el entrecomillado es mio). Los doce jabones se habían derretido, quedando reducidos a aquello. Nunca se pudo averiguar con qué materia había podido fabricar el sagaz catalán aquellos jabones fantasma.
Esos refugiados animaban mucho el ambiente de Pasajes, bastante triste por lo demás. Algunos tenían a sus familiares en ambos frentes, y otros, en el exilio.
Había tambien quien exhibía elocuentemente su nariz rota o sus cicatrices, siempre fruto de interrogatorios. La mujer que le lavaba la ropa a María le contó que, cuando volvió de Francia, donde se había refugiado en casa de unos parientes al principio de la guerra, no encontró a su marido en Pasajes. Estaba encarcelado con otros en la improvisada prisión de Lezo. Nunca le permitieron ver a su marido, pero ella todos los días le llevaba la comida en un cestito. Iba siempre a pie, por Rentería. Un mediodia, el soldado que acostumbraba a cogerle la cesta, le dijo:
--No se moleste más. Su marido no necesita ya comida.
Nadie le dio jamás la menor explicación".
--------------------------------------------------------------------------------------------------------------
MEANS OF SURVIVAL AND DEATH (2)
(I'm sorry but I'm not even trying to upload a picture for now...)
Another Catalonian, baked in his house oven, delicious cakes which his wife, in a sparklingly-white apron, sold at the Rentería market. Others sold "churros" (typical Spanish delicacies) and candies, also home-made.
An ingenious "gerundense" (from Girona, Catalonia) made small rubber rugs which replaced the usual doormats. To do this he took old tires he found in the garbage dumps. He cut the tires in strips, braided them and fabricated the rugs. He also made "abarcas" (sort of rubber espadrilles) with bigger pieces. Others sold mats made from dried corn leaves.
Everything was useful in those times of generalized poverty.
The soap-makers were innumerable. They sold their merchandise door-to-door. One of them gipped María mercilessly. He sold her twelve, beautiful white soaps, neatly lined up in a tightly-closed cardboard box, with instructions that she shouldn't use them until three or four days later and, especially, shouldn't open the box until their usage. When María, four days later, opened the box she found twelve "spits". The twelve soaps had melted and had reduced to the latter. They never found out with what "material" the shrewd Catalonian had produced the ghost soaps.
Those refugees livened up very much the ambience of Pasajes, very sad on the other hand. Many had relatives fighting on both sides and others, in exile.
There were those who proudly showed their broken noses and scars, always a result of interrogations. The woman who washed the laundry in María's house, told her that, after being exiled in France with relatives at the beginning of the war, came back to find that her husband was not in Pasajes. He was jailed, among others, in the improvised Lezo prison. They never allowed her to see him but, everyday, walking from Rentería, took a basket of food to him. One day, the soldier who used to take the basket, told her:
-- Don't bother any more. Your husband no longer needs food.
No one, ever, gave her the least explanation.
"Otro catalán, valiéndose de su horno doméstico, cocía magníficas tortas que su mujer, ataviada con un blanquísimo y amplio delantal con peto, vendía en una mesa del mercado de Rentería. Otros vendían churros y caramelos, tambien de fabricación casera.
Un ingenioso gerundense fabricaba una especie de pequeñas alfombras de goma, que sustituían a los felpudos. Para ello, se valía de neumáticos viejos que recogía en los vertederos de basura. Hacía tiras de los neumáticos y, trenzándolas, obtenía también alfombras. Igualmente fabricaba albarcas con trozos mayores de neumático. Otros vendían esteras hechas con hojas secas de maíz.
Todo era útil en aquella época de penuria generalizada.
Los fabricantes de jabón eran incontables, y vendían su mercancía de casa en casa. Uno de éstos timó a María sin el menor reparo. Le vendió doce hermosos jabones blancos y relucientes, colocados en perfecta alineación en una caja de cartón bien tapada, con la recomendación de que no los usase hasta pasados tres o cuatro dias y, sobre todo, de que no los destapase hasta el momento de tenerlos que usar. Cuando María, a los cuatro dias, abrió la caja para usar un jabón, se encontró con doce "escupitajos" (el entrecomillado es mio). Los doce jabones se habían derretido, quedando reducidos a aquello. Nunca se pudo averiguar con qué materia había podido fabricar el sagaz catalán aquellos jabones fantasma.
Esos refugiados animaban mucho el ambiente de Pasajes, bastante triste por lo demás. Algunos tenían a sus familiares en ambos frentes, y otros, en el exilio.
Había tambien quien exhibía elocuentemente su nariz rota o sus cicatrices, siempre fruto de interrogatorios. La mujer que le lavaba la ropa a María le contó que, cuando volvió de Francia, donde se había refugiado en casa de unos parientes al principio de la guerra, no encontró a su marido en Pasajes. Estaba encarcelado con otros en la improvisada prisión de Lezo. Nunca le permitieron ver a su marido, pero ella todos los días le llevaba la comida en un cestito. Iba siempre a pie, por Rentería. Un mediodia, el soldado que acostumbraba a cogerle la cesta, le dijo:
--No se moleste más. Su marido no necesita ya comida.
Nadie le dio jamás la menor explicación".
--------------------------------------------------------------------------------------------------------------
MEANS OF SURVIVAL AND DEATH (2)
(I'm sorry but I'm not even trying to upload a picture for now...)
Another Catalonian, baked in his house oven, delicious cakes which his wife, in a sparklingly-white apron, sold at the Rentería market. Others sold "churros" (typical Spanish delicacies) and candies, also home-made.
An ingenious "gerundense" (from Girona, Catalonia) made small rubber rugs which replaced the usual doormats. To do this he took old tires he found in the garbage dumps. He cut the tires in strips, braided them and fabricated the rugs. He also made "abarcas" (sort of rubber espadrilles) with bigger pieces. Others sold mats made from dried corn leaves.
Everything was useful in those times of generalized poverty.
The soap-makers were innumerable. They sold their merchandise door-to-door. One of them gipped María mercilessly. He sold her twelve, beautiful white soaps, neatly lined up in a tightly-closed cardboard box, with instructions that she shouldn't use them until three or four days later and, especially, shouldn't open the box until their usage. When María, four days later, opened the box she found twelve "spits". The twelve soaps had melted and had reduced to the latter. They never found out with what "material" the shrewd Catalonian had produced the ghost soaps.
Those refugees livened up very much the ambience of Pasajes, very sad on the other hand. Many had relatives fighting on both sides and others, in exile.
There were those who proudly showed their broken noses and scars, always a result of interrogations. The woman who washed the laundry in María's house, told her that, after being exiled in France with relatives at the beginning of the war, came back to find that her husband was not in Pasajes. He was jailed, among others, in the improvised Lezo prison. They never allowed her to see him but, everyday, walking from Rentería, took a basket of food to him. One day, the soldier who used to take the basket, told her:
-- Don't bother any more. Your husband no longer needs food.
No one, ever, gave her the least explanation.
martes, 22 de septiembre de 2009
FORMAS DE SUPERVIVENCIA Y DE MUERTE (1)
(No sé qué pasa pero Google ya no me deja poner más fotos. Quería poner una de campanas pero es imposible. ¿Será que tengo que borrar las anteriores? ¿Alguien sabe cómo lo hago? Es que no veo "suprimir" por ninguna parte).
"Un dia fueron echadas las campanas al vuelo y se lanzaron cohetes. La charanga militar recorrió las calles de Pasajes, bordeadas por filas de hombres, mujeres y niños con el brazo extendido. La zona norte se había hundido totalmente con la conquista de Gijón y Avilés.
Muchos pisos de los tres Pasajes, que habían quedado cerrados tras el éxodo de sus habitantes, se fueron abriendo para dar entrada a familias arrastradas por la resaca de la guerra. En San Sebastián, el número de refugiados llegó a los 80.000.
La mayor parte de los que vivían en Pasajes eran catalanes y madrileños. Esperaban que Cataluña se librase de los rojos y que se rompiese la resistencia de Madrid para retornar a sus casas. Las últimas noticias daban la impresión de que se iba a intentar un nuevo asalto a la capital, esta vez por Guadalajara.
En la casa de enfrente de la de los Zumeta, vivía una familia madrileña compuesta por un joven y elegante matrimonio y ocho niños, todos varones y todos espléndidos. María se admiraba contemplando aquella lucida familia que, a pesar de las penurias por las que indudablemente pasaban, se conservaba rozagante. Siempre iban todos juntos, muy aseados y bien vestidos. Se les veía en todas partes: paseándose en lancha por la bahía, pescando en el muelle, oyendo misa en la iglesia, haciendo compras en el mercado de Rentería... Eran muy alegres, pero ninguno de los chicos se desmandaba.
La colonia de catalanes era la más importante. Siempre prácticos, organizaban sus pequeños negocios para ir tirando mientras se viesen obligados a permanecer en el País Vasco. Un grupo de ellos montó, en una barraca de las afueras, una pequeña fundición de vidrio cuyo fuego alimentaban con ramas secas que recogían en el campo y en los bosques vecinos. Allí fundían todas las botellas que habían ido recogiendo de casa en casa." (Continuará)
-------------------------------------------------------------------------------------------------------------------
MEANS OF SURVIVAL AND DEATH (1)
(I don't know what's happening but Google doesn't let me upload any pictures. I wanted to upload one of bells but, impossible. Maybe I have to rub the others out but I don't see "rub it out" anywhere. Someone knows how I should do it?)
One day bells tolled and firecrackers exploded. The military parade went through the streets of Pasajes, bordered by men, women and children with their arms extended. The north had succumbed totally with the conquest of Gijón and Avilés.
Many of the flats in the three Pasajes that had been closed, due to the exodus of its inhabitants, were opened to lodge families who had been drawn by the tide of the war. In San Sebastián, there were 80,000 refugees.
The majority that lived in Pasajes were Catalonians and Madrilians. The former waited until Catalonia was liberated from the "reds" and the latter that the resistance fall in Madrid in order to return to their homes. The latest news was that another attack was prepared against the capital, this time from Guadalajara.
In front of the Zumeta's house, lived a Madrilian family made up of a young and elegant couple with eight children, all beautiful boys. María enjoyed watching that wonderful family, which even though, surely, they were going through hard times, were extremely attractive and lively. They were always together, very clean and well dressed. They were seen everywhere: on a boat ride through the bay, fishing in the harbour, in Mass, shopping in the Rentería market. Always happy and the boys very well-behaved.
The Catalonian colony was by far the biggest. Very pragmatic, they organized their small enterprises in order to get by while they were obliged to remain in the Basque country. A group of them set up, in a shed of the outskirts, a small glass foundry where, fed by wood found in the forest, they melted all the bottles that they gathered from house to house. (It will continue)
"Un dia fueron echadas las campanas al vuelo y se lanzaron cohetes. La charanga militar recorrió las calles de Pasajes, bordeadas por filas de hombres, mujeres y niños con el brazo extendido. La zona norte se había hundido totalmente con la conquista de Gijón y Avilés.
Muchos pisos de los tres Pasajes, que habían quedado cerrados tras el éxodo de sus habitantes, se fueron abriendo para dar entrada a familias arrastradas por la resaca de la guerra. En San Sebastián, el número de refugiados llegó a los 80.000.
La mayor parte de los que vivían en Pasajes eran catalanes y madrileños. Esperaban que Cataluña se librase de los rojos y que se rompiese la resistencia de Madrid para retornar a sus casas. Las últimas noticias daban la impresión de que se iba a intentar un nuevo asalto a la capital, esta vez por Guadalajara.
En la casa de enfrente de la de los Zumeta, vivía una familia madrileña compuesta por un joven y elegante matrimonio y ocho niños, todos varones y todos espléndidos. María se admiraba contemplando aquella lucida familia que, a pesar de las penurias por las que indudablemente pasaban, se conservaba rozagante. Siempre iban todos juntos, muy aseados y bien vestidos. Se les veía en todas partes: paseándose en lancha por la bahía, pescando en el muelle, oyendo misa en la iglesia, haciendo compras en el mercado de Rentería... Eran muy alegres, pero ninguno de los chicos se desmandaba.
La colonia de catalanes era la más importante. Siempre prácticos, organizaban sus pequeños negocios para ir tirando mientras se viesen obligados a permanecer en el País Vasco. Un grupo de ellos montó, en una barraca de las afueras, una pequeña fundición de vidrio cuyo fuego alimentaban con ramas secas que recogían en el campo y en los bosques vecinos. Allí fundían todas las botellas que habían ido recogiendo de casa en casa." (Continuará)
-------------------------------------------------------------------------------------------------------------------
MEANS OF SURVIVAL AND DEATH (1)
(I don't know what's happening but Google doesn't let me upload any pictures. I wanted to upload one of bells but, impossible. Maybe I have to rub the others out but I don't see "rub it out" anywhere. Someone knows how I should do it?)
One day bells tolled and firecrackers exploded. The military parade went through the streets of Pasajes, bordered by men, women and children with their arms extended. The north had succumbed totally with the conquest of Gijón and Avilés.
Many of the flats in the three Pasajes that had been closed, due to the exodus of its inhabitants, were opened to lodge families who had been drawn by the tide of the war. In San Sebastián, there were 80,000 refugees.
The majority that lived in Pasajes were Catalonians and Madrilians. The former waited until Catalonia was liberated from the "reds" and the latter that the resistance fall in Madrid in order to return to their homes. The latest news was that another attack was prepared against the capital, this time from Guadalajara.
In front of the Zumeta's house, lived a Madrilian family made up of a young and elegant couple with eight children, all beautiful boys. María enjoyed watching that wonderful family, which even though, surely, they were going through hard times, were extremely attractive and lively. They were always together, very clean and well dressed. They were seen everywhere: on a boat ride through the bay, fishing in the harbour, in Mass, shopping in the Rentería market. Always happy and the boys very well-behaved.
The Catalonian colony was by far the biggest. Very pragmatic, they organized their small enterprises in order to get by while they were obliged to remain in the Basque country. A group of them set up, in a shed of the outskirts, a small glass foundry where, fed by wood found in the forest, they melted all the bottles that they gathered from house to house. (It will continue)
sábado, 19 de septiembre de 2009
NUEVOS SEÑORES, NUEVAS NORMAS (3) Y FIN DE ESTE CAPÍTULO
"--Pero, ¿no me conoce? Soy la mujer de Miguel Zumeta. Digame a qué oficina tengo que ir para enterarme de la cuestión de rentas detenidas y contribuciones.
La cara del guardapesca volvió a enrojecer y, sin duda temeroso de ponerse en situación comprometida si algún mandamás le viese hablando con una persona de antecedentes republicanos, empezó a bajar precipitadamente las escaleras, al tiempo que mascullaba:
--Yo no sé nada... Yo no sé nada...
Y salió del Ayuntamiento a grandes zancadas.
A María le costó reaccionar ante la actitud de aquel estúpido cobarde. Aunque con dificultad, siguió haciendo sus gestiones, de las que sólo pudo sacar en limpio que, durante su ausencia, nadie había pagado las rentas rústicas y urbanas, o éstas se habían esfumado. Allí no quedaba nada que recoger. Pero, según dictaminó un abogado a quien consultaron, las contribuciones y demás obligaciones no se podían descuidar.
En ese estado de cosas, y dado que la familia de un alto funcionario del Estado--familia encopetada y religiosa--habitaba una casa de su propiedad, pensaron que, entendiéndose directamente con sus inquilinos, conseguirían obtener algo.
Cuando expusieron a éstos sus apuros monetarios, los inquilinos les propusieron pagarles la renta...pero reducida a la cuarta parte, y con un documento firmado diciendo que "ni ahora ni nunca" se podría cobrar más. En cuanto a los atrasos de los últimos años, la señora dijo elegantemente:
--Haremos una "lacune" (nos olvidaremos del tema)
Obviamente, los Zumeta no cobraron nada, pero tampoco firmaron el documento".
---------------------------------------------------------------------------------------------------------------
NEW MASTERS, NEW RULES (3) and end of this chapter
--But, don't you know me? I'm Miguel Zumeta's wife. Please tell me which office I should go to find out about retained rents and taxes.
The Fishing Guard blushed again and, afraid that one of the "big bosses" should see him talking to a renowned Republican, fled down the stairs, muttering:
--I don't know anything... I don't know anything...
Leaving the City Hall with long strides.
María took time to react to that stupid, cowardly man's attitude. She continued, not without difficulty, doing her errands. The only thing she was able to find out was that during their absence, no one had paid the rustic nor urban rent or that these had disappeared altogether. There was no money to pick up. However, a lawyer they talked to, told them that these obligations could not be left unpaid.
Seeing the situation was the way it was, and since the family of a high civil servant of the Regime--very posh and religious--lived in their property, Miguel and María thought it would be best to talk to them directly in order to obtain something.
When they told these people of their dire financial situation, they offered to pay the rent... but, four times less plus a signed document stating that they would never, ever, raise it. As regards to the arrears, the lady elegantly said:
--We'll make a "lacune" (we'll forget it for now)
Needless to say, the Zumetas didn't get their money but they didn't sign the document either.
La cara del guardapesca volvió a enrojecer y, sin duda temeroso de ponerse en situación comprometida si algún mandamás le viese hablando con una persona de antecedentes republicanos, empezó a bajar precipitadamente las escaleras, al tiempo que mascullaba:
--Yo no sé nada... Yo no sé nada...
Y salió del Ayuntamiento a grandes zancadas.
A María le costó reaccionar ante la actitud de aquel estúpido cobarde. Aunque con dificultad, siguió haciendo sus gestiones, de las que sólo pudo sacar en limpio que, durante su ausencia, nadie había pagado las rentas rústicas y urbanas, o éstas se habían esfumado. Allí no quedaba nada que recoger. Pero, según dictaminó un abogado a quien consultaron, las contribuciones y demás obligaciones no se podían descuidar.
En ese estado de cosas, y dado que la familia de un alto funcionario del Estado--familia encopetada y religiosa--habitaba una casa de su propiedad, pensaron que, entendiéndose directamente con sus inquilinos, conseguirían obtener algo.
Cuando expusieron a éstos sus apuros monetarios, los inquilinos les propusieron pagarles la renta...pero reducida a la cuarta parte, y con un documento firmado diciendo que "ni ahora ni nunca" se podría cobrar más. En cuanto a los atrasos de los últimos años, la señora dijo elegantemente:
--Haremos una "lacune" (nos olvidaremos del tema)
Obviamente, los Zumeta no cobraron nada, pero tampoco firmaron el documento".
---------------------------------------------------------------------------------------------------------------
NEW MASTERS, NEW RULES (3) and end of this chapter
--But, don't you know me? I'm Miguel Zumeta's wife. Please tell me which office I should go to find out about retained rents and taxes.
The Fishing Guard blushed again and, afraid that one of the "big bosses" should see him talking to a renowned Republican, fled down the stairs, muttering:
--I don't know anything... I don't know anything...
Leaving the City Hall with long strides.
María took time to react to that stupid, cowardly man's attitude. She continued, not without difficulty, doing her errands. The only thing she was able to find out was that during their absence, no one had paid the rustic nor urban rent or that these had disappeared altogether. There was no money to pick up. However, a lawyer they talked to, told them that these obligations could not be left unpaid.
Seeing the situation was the way it was, and since the family of a high civil servant of the Regime--very posh and religious--lived in their property, Miguel and María thought it would be best to talk to them directly in order to obtain something.
When they told these people of their dire financial situation, they offered to pay the rent... but, four times less plus a signed document stating that they would never, ever, raise it. As regards to the arrears, the lady elegantly said:
--We'll make a "lacune" (we'll forget it for now)
Needless to say, the Zumetas didn't get their money but they didn't sign the document either.
viernes, 18 de septiembre de 2009
NUEVOS SEÑORES, NUEVAS NORMAS (2)
(He querido poner foto del Ayuntamiento de Irún pero no he podido, no sube. No entiendo porque...)
"La casa estaba amueblada, por lo que la pudieron ocupar enseguida. Sin embargo, pocos dias despues se dieron cuenta de que no tenían más remedio que poner en orden sus asuntos económicos. A fin de aclarar el estado de las cosas, se veían precisados a ir, por de pronto, a Irún, pero a Miguel le resultaba dura la posibilidad de encontrarse con cosas desagradables, y sobre todo, le habría molestado sobremanera toparse con amigos de toda la vida que pudieran rechazarle por divergencias políticas. A causa de una denuncia, habían tenido que soportar la víspera un registro policial en la casa. No encontraron nada sospechoso, y les molestaron poco, pero siempre les quedaría la duda, no exenta de resquemor, acerca de la identidad del posible denunciante.
María fue, al fin, la que se decidió a acercarse a Irún para llevar a cabo los primeros sondeos. Cogió el tren y, al salir de la estación, se cruzó con algunas personas conocidas, que la miraron con cierto asombro y apenas la saludaron. Tampoco notó mucha efusión en una pariente de su marido, una señora, ya mayor, a la que fue a visitar.
Aunque María no dio gran importancia al fracaso de estos primeros contactos con la España de Franco, decidió no hacer más visitas y se encaminó directamente al Ayuntamiento. Allí se encontró algo despistada ante la multitud de caras nuevas en las oficinas. No sabía a quien dirigirse. Era notoria la presencia de gran cantidad de militares que subían y bajaban por la amplia escalinata. Le llamó la atención que incluso los civiles vistieran prendas pertenecientes al ejército. Tambien pululaban por allí mujeres vestidas de enfermeras.
Cuando empezaba a impacientarse por no saber a quien recurrir, vio que subía por las escaleras un hombre altísimo. Se trataba de un guardapesca a quien Miguel había proporcionado remuneradores y poco fatigosos trabajos. Siempre le habían considerado como un amigo, y el guardapesca profesaba un gran afecto a Miguel. LLevaba botas de montar y una especie de poncho pardo que le llegaba casi hasta los pies. En la cabeza una boina roja.
--¡Ah!, Mariano--le dijo María sonriente, acercándose a él--, ¡Qué suerte encontrarle!
El guardapesca enrojeció al verla y luego se puso pálido". (Continuará)
-------------------------------------------------------------------------------------------------------------
NEW MASTERS, NEW RULES (2)
(I wanted to upload a picture of Irun's City Hall but it's been impossible. I don't understand why...)
The house was furnished so they moved in right away. A few days later, they realized they had to settle their financial situation. In order to do this, they had to go to Irún. Miguel felt very uncomfortable with the idea since he didn't know how people he had known for ages would react, due to political differences, when they saw him. As a matter of fact, due to a recent accusation, the police had registered their house. They didn't find anything suspicious so didn't bother them too much. However, the doubt as to whom had placed the accusation was very unsettling.
María decided she would go to Irún. She took a train and as she left the station, she ran into people she knew, who looked at her surprisingly and hardly said hello. She went to visit one of Miguel's relatives, an older lady, who wasn't very friendly either.
Even though María didn't pay too much attention to these first encounters with Franco's Spain, she decided not to visit anybody else and went directly to the City Hall. There she was a bit confused with all the new faces she saw. She didn't know where to go or who to ask. Military personnel went up and down the large stairway. She was surprised to see that even the civilians wore military uniforms. There were also many nurses.
When she started to lose patience because she didn't know where to go, she saw a very tall man coming up the stairs. He was a Fishing Guard who had done a few simple and very well paid tasks for Miguel and, who she knew, liked him very much. They had always considered him a good friend. He was wearing horseback-riding boots, a sort of large brown cape that almost reached his feet and a red beret.
---Oh!, Mariano--she said smilingly coming closer to him--, How lucky to have found you!
The Fishing Guard blushed and, afterwards, paled. (It will continue)
"La casa estaba amueblada, por lo que la pudieron ocupar enseguida. Sin embargo, pocos dias despues se dieron cuenta de que no tenían más remedio que poner en orden sus asuntos económicos. A fin de aclarar el estado de las cosas, se veían precisados a ir, por de pronto, a Irún, pero a Miguel le resultaba dura la posibilidad de encontrarse con cosas desagradables, y sobre todo, le habría molestado sobremanera toparse con amigos de toda la vida que pudieran rechazarle por divergencias políticas. A causa de una denuncia, habían tenido que soportar la víspera un registro policial en la casa. No encontraron nada sospechoso, y les molestaron poco, pero siempre les quedaría la duda, no exenta de resquemor, acerca de la identidad del posible denunciante.
María fue, al fin, la que se decidió a acercarse a Irún para llevar a cabo los primeros sondeos. Cogió el tren y, al salir de la estación, se cruzó con algunas personas conocidas, que la miraron con cierto asombro y apenas la saludaron. Tampoco notó mucha efusión en una pariente de su marido, una señora, ya mayor, a la que fue a visitar.
Aunque María no dio gran importancia al fracaso de estos primeros contactos con la España de Franco, decidió no hacer más visitas y se encaminó directamente al Ayuntamiento. Allí se encontró algo despistada ante la multitud de caras nuevas en las oficinas. No sabía a quien dirigirse. Era notoria la presencia de gran cantidad de militares que subían y bajaban por la amplia escalinata. Le llamó la atención que incluso los civiles vistieran prendas pertenecientes al ejército. Tambien pululaban por allí mujeres vestidas de enfermeras.
Cuando empezaba a impacientarse por no saber a quien recurrir, vio que subía por las escaleras un hombre altísimo. Se trataba de un guardapesca a quien Miguel había proporcionado remuneradores y poco fatigosos trabajos. Siempre le habían considerado como un amigo, y el guardapesca profesaba un gran afecto a Miguel. LLevaba botas de montar y una especie de poncho pardo que le llegaba casi hasta los pies. En la cabeza una boina roja.
--¡Ah!, Mariano--le dijo María sonriente, acercándose a él--, ¡Qué suerte encontrarle!
El guardapesca enrojeció al verla y luego se puso pálido". (Continuará)
-------------------------------------------------------------------------------------------------------------
NEW MASTERS, NEW RULES (2)
(I wanted to upload a picture of Irun's City Hall but it's been impossible. I don't understand why...)
The house was furnished so they moved in right away. A few days later, they realized they had to settle their financial situation. In order to do this, they had to go to Irún. Miguel felt very uncomfortable with the idea since he didn't know how people he had known for ages would react, due to political differences, when they saw him. As a matter of fact, due to a recent accusation, the police had registered their house. They didn't find anything suspicious so didn't bother them too much. However, the doubt as to whom had placed the accusation was very unsettling.
María decided she would go to Irún. She took a train and as she left the station, she ran into people she knew, who looked at her surprisingly and hardly said hello. She went to visit one of Miguel's relatives, an older lady, who wasn't very friendly either.
Even though María didn't pay too much attention to these first encounters with Franco's Spain, she decided not to visit anybody else and went directly to the City Hall. There she was a bit confused with all the new faces she saw. She didn't know where to go or who to ask. Military personnel went up and down the large stairway. She was surprised to see that even the civilians wore military uniforms. There were also many nurses.
When she started to lose patience because she didn't know where to go, she saw a very tall man coming up the stairs. He was a Fishing Guard who had done a few simple and very well paid tasks for Miguel and, who she knew, liked him very much. They had always considered him a good friend. He was wearing horseback-riding boots, a sort of large brown cape that almost reached his feet and a red beret.
---Oh!, Mariano--she said smilingly coming closer to him--, How lucky to have found you!
The Fishing Guard blushed and, afterwards, paled. (It will continue)
miércoles, 16 de septiembre de 2009
NUEVOS SEÑORES, NUEVAS NORMAS (1)
"Al otro lado del puente los esperaba un grupo de amigos que, aunque de diferentes ideologías, apreciaban al matrimonio. Sin embargo, y a pesar de la mutua simpatía, las reticencias eran evidentes.
Miguel entró en una caseta donde tuvo que sufrir un interrogatorio. No cabía duda de que sobre él recaían muchas denuncias, pero tambien se notaba la presión de fuerzas favorables.
Se les concedió permiso para pasar, pero no podían quedarse en Irún. Su casa (nota mia: Beraun), que era muy grande, estaba ocupada por varias familias que lo habían perdido todo en el incendio.
Atravesaron la ciudad en el mismo taxi que les había traido desde Hendaya, y su consternación crecía a medida que avanzaba el vehículo. La arteria principial de la localidad, donde en otro tiempo se hallaban las mejores casas y los comercios más lujosos, había quedado reducida a un montón de escombros.
Había transcurrido ya más de un año desde la catástrofe, por lo que la hiedra, las zarzas y las ortigas se abrían paso entre los cascotes. Llamaba especialmente la atención la invasión de verónicas, un arbusto de hoja alargada y flor de forma y coloración de las lilas, verdaderas reinas y señoras de las ruinas. Asomaban por la ventana de una bodega, por el arco de una entrada, entre los sillares amontonados de lo que fuera un salón...
Les dijeron que aquellas ruinas estaban plagadas de lechuzas que aparecían al anochecer. Tambien las ratas, expulsadas de las casas viejas por el fuego, se habían adueñado de aquella calle, bordeada a derecha e izquierda por sendas hileras de escombros ennegrecidos por el fuego, la lluvia y el sol.
La pareja se dirigió a San Sebastián, a casa de unos familiares (nota mia: donde estaban sus cinco hijos) que les acogieron con cariño. Unas semanas despues, pudieron instalarse en Pasajes Ancho, y Miguel recuperó su empleo. Alquilaron un piso sellado desde la llegada de los requetés. Un sargento de la Guardia Civil quitó el sello y abrió la puerta delante de Miguel. Todo estaba en el más completo desorden. Se veía que sus moradores habían sido sorprendidos y que se habían visto obligados a abandonarlo precipitadamente. Las camas estaban deshechas; los armarios, abiertos y despanzurrados; y los muebles, volcados. Lo que más les llamó la atención fue un huevo frito a medio hacer que había quedado fosilizado en una sartén, sobre el fogón de la cocina." (Continuará)
----------------------------------------------------------------------------------------------------------------
NEW MASTERS, NEW RULES (1)
At the border, some of their friends were there to greet them. Even though they had different political ideas, they liked the couple. However, in spite of their mutual friendship, the situation was tense.
Miguel entered a cubicle where he was interrogated. There was no doubt that several accusations had been put forward against him but they also noticed favourable forces.
They were given permission to enter but they couldn't stay in Irún. Their house (my note: Beraun) which was very big, was occupied by several families who had lost everything in the fire.
They crossed the city in the same cab that brought them from Hendaye and their distress increased as the car went by the main avenue where, not so long ago, were the best houses and most luxurious shops. Now it was reduced to a pile of rubble.
A year had almost gone by since the disaster. The ivy, wild bushes and nettles camped everywhere among the ruins. Particularly, the "veronicas", lilac-coloured wild flowers, were the absolute mistresses. They came out of windows, the arches of entrances, the scattered stones of what must have been a living room...
They were told that owls abounded, appearing at night, as well as rats which had escaped from the fire that destroyed the old houses. They had taken possession of that street, bordered left and right by debris blackened by the fire, rain and sun.
The couple went to San Sebastian where they were housed by relatives (my note: and to pick up their five children) who welcomed them very warmly. A few weeks later, they moved to Pasajes Ancho and Miguel recuperated his job. They rented an apartment that had been sealed by the military. A policeman lifted the seal and opened the door in front of Miguel. Everything was in complete disorder, one could see that the people who lived there had to leave in a great hurry. The beds were unmade, the wardrobes open, all messed up, and the furniture upside down. What struck them the most was a half-fried egg fossilized in a pan on top of the kitchen stove. (It will continue)
Miguel entró en una caseta donde tuvo que sufrir un interrogatorio. No cabía duda de que sobre él recaían muchas denuncias, pero tambien se notaba la presión de fuerzas favorables.
Se les concedió permiso para pasar, pero no podían quedarse en Irún. Su casa (nota mia: Beraun), que era muy grande, estaba ocupada por varias familias que lo habían perdido todo en el incendio.
Atravesaron la ciudad en el mismo taxi que les había traido desde Hendaya, y su consternación crecía a medida que avanzaba el vehículo. La arteria principial de la localidad, donde en otro tiempo se hallaban las mejores casas y los comercios más lujosos, había quedado reducida a un montón de escombros.
Había transcurrido ya más de un año desde la catástrofe, por lo que la hiedra, las zarzas y las ortigas se abrían paso entre los cascotes. Llamaba especialmente la atención la invasión de verónicas, un arbusto de hoja alargada y flor de forma y coloración de las lilas, verdaderas reinas y señoras de las ruinas. Asomaban por la ventana de una bodega, por el arco de una entrada, entre los sillares amontonados de lo que fuera un salón...
Les dijeron que aquellas ruinas estaban plagadas de lechuzas que aparecían al anochecer. Tambien las ratas, expulsadas de las casas viejas por el fuego, se habían adueñado de aquella calle, bordeada a derecha e izquierda por sendas hileras de escombros ennegrecidos por el fuego, la lluvia y el sol.
La pareja se dirigió a San Sebastián, a casa de unos familiares (nota mia: donde estaban sus cinco hijos) que les acogieron con cariño. Unas semanas despues, pudieron instalarse en Pasajes Ancho, y Miguel recuperó su empleo. Alquilaron un piso sellado desde la llegada de los requetés. Un sargento de la Guardia Civil quitó el sello y abrió la puerta delante de Miguel. Todo estaba en el más completo desorden. Se veía que sus moradores habían sido sorprendidos y que se habían visto obligados a abandonarlo precipitadamente. Las camas estaban deshechas; los armarios, abiertos y despanzurrados; y los muebles, volcados. Lo que más les llamó la atención fue un huevo frito a medio hacer que había quedado fosilizado en una sartén, sobre el fogón de la cocina." (Continuará)
----------------------------------------------------------------------------------------------------------------
NEW MASTERS, NEW RULES (1)
At the border, some of their friends were there to greet them. Even though they had different political ideas, they liked the couple. However, in spite of their mutual friendship, the situation was tense.
Miguel entered a cubicle where he was interrogated. There was no doubt that several accusations had been put forward against him but they also noticed favourable forces.
They were given permission to enter but they couldn't stay in Irún. Their house (my note: Beraun) which was very big, was occupied by several families who had lost everything in the fire.
They crossed the city in the same cab that brought them from Hendaye and their distress increased as the car went by the main avenue where, not so long ago, were the best houses and most luxurious shops. Now it was reduced to a pile of rubble.
A year had almost gone by since the disaster. The ivy, wild bushes and nettles camped everywhere among the ruins. Particularly, the "veronicas", lilac-coloured wild flowers, were the absolute mistresses. They came out of windows, the arches of entrances, the scattered stones of what must have been a living room...
They were told that owls abounded, appearing at night, as well as rats which had escaped from the fire that destroyed the old houses. They had taken possession of that street, bordered left and right by debris blackened by the fire, rain and sun.
The couple went to San Sebastian where they were housed by relatives (my note: and to pick up their five children) who welcomed them very warmly. A few weeks later, they moved to Pasajes Ancho and Miguel recuperated his job. They rented an apartment that had been sealed by the military. A policeman lifted the seal and opened the door in front of Miguel. Everything was in complete disorder, one could see that the people who lived there had to leave in a great hurry. The beds were unmade, the wardrobes open, all messed up, and the furniture upside down. What struck them the most was a half-fried egg fossilized in a pan on top of the kitchen stove. (It will continue)
domingo, 13 de septiembre de 2009
ÚLTIMAS VACILACIONES
"De cuando en cuando, se seguían oyendo desde Hendaya los cohetes y el campaneo de Irún y Fuenterrabía, que anunciaba la caída de alguna ciudad o de alguna posición importante.
Muchas familias refugiadas con hijos jóvenes en edad militar estaban inquietas ante la perspectiva de recibir desde España avisos para que los mozos se incorporasen al ejército de Franco.
Los derechistas muy significados, y sobre todo los que habían estado presos en el Fuerte de Guadalupe, tenían vara alta para cruzar la frontera en ambos sentidos y en todo momento. Éstos se afanaban en convencer a los que aún quedaban en Francia de que, aunque todavía quedaba mucho por conquistar, el pleito estaba totalmente perdido para los republicanos y de que, gracias a la magnanimidad de Franco, podían regresar tranquilamente a sus casas.
Sin embargo, por otro lado llegaban noticias poco tranquilizadoras. Las denuncias no habían disminuido; la más mínima sospecha era motivo suficiente para encarcelar al sospechoso, y se contaban casos como el de un insignificante trapero a quien habían fusilado por haber sido visto, antes de empezar el movimiento, en una taberna acompañado de un periodista de ideas revolucionarias. Tambien se hablaba del caso de un infeliz a quien mataron por equivocación, pues tenía el mismo apellido que un individuo peligroso que se encontraba ya en Chile. Bien es verdad que todo esto había ocurrido en los primeros meses del conflicto.
Los familiares de Miguel y María les enviaban emisarios para convencerlos de que debían de entrar ya en España, pero el temor a ser objeto de represalias por su parentesco con personas muy significadas en la República disuadía a la pareja.
Sin embargo, un día corrió una noticia alarmante, que luego resultó falsa. El gobierno francés iba a dictar órdenes para que todos los refugiados españoles se alejasen de las fronteras, obligándoles a fijar sus residencias a quinientos kilómetros de ellas.
Para Miguel y María, que estaban ya cansados y no tenían ganas de emprender una nueva aventura, ésta fue la gota que colmó la medida, y así decidieron pedir permiso para entrar en España.
Al cabo de dos dias, se presentó en su casa un hombre menudo y rubio, muy intransigente y reaccionario, pero que demostró ser un buen amigo. Respondió por ellos, y los Zumeta cruzaron la frontera en su compañía."
-------------------------------------------------------------------------------------------------------------------
FINAL HESITATIONS
From time to time, firecrackers and bells ringing could still be heard from Hendaye announcing the fall of an important city and/or position.
Many refugee families, with young sons in military age, were worried that they might be drafted to Franco's army.
The most conspicuous rightists, especially those who had been imprisoned in the Guadalupe Fort, could cross the border back and forth as often as they wished. They strongly tried to convince those who were still in France, that even though they still had positions to conquer, the battle was totally lost for the Republicans and that, thanks to Franco's magnanimity, they could go back to their homes.
On the other hand, very disturbing news arrived. The accusations hadn't diminished; the slightest suspicion was reason enough to imprison a suspect. Stories were heard like that of the poor ragman who was shot because he had been seen, before the conflict, in a bar in the company of a newspaperman who had very revolutionary ideas. Another story that went around was of the poor soul who was also killed because his last name coincided with a man who was already in Chile.
Miguel and Maria's family sent emissaries to convince them to return to Spain but the fact that they might be subject to retaliations, due to their relationship with highly significant Republicans, held them back.
However, one day alarming news went around, which later turned out to be false, that the French Government was going to pass a law whereby all refugees had to move and settle at least 500 kilometres away from the borders.
For Miguel and María who were so tired, and didn't want any more adventures, this was the last drop. They decided to ask for a permit to return to Spain.
Two days later a young slight, blond man, very intransigent and reactionary but who turned out to be a good friend, sponsored them, and the Zumetas crossed the border in his company.
sábado, 12 de septiembre de 2009
CITROËN
¿Crisis? ¿Qué crisis? para Citroën, Francia, parece que no existe. Hoy hemos llevado, más de treinta guías--hemos sacado gente que hablase francés desde debajo de las piedras-- ("oficiales" somos 20 pero no todos hablan francés), a más de 1.350 empleados de Citroën de toda Francia, que han llegado en un crucero, a visitar la isla. Todo, absolutamente todo (propinas y bebidas incluidas en el barco) pagado por la empresa. ¡Eso es generosidad hacia sus empleados, recórcholis! He quedado alucinada. El grupo que me tocó fué verdaderamente encantador, escuchando atentamente todas mis historietas. Si algun dia tengo coche, creo que será Citroën seguro.
-----------------------------------------------------------------------------------------------------------
Crisis? What crisis? It seems that for Citroën France, it doesn't exist. Today, more than 30 guides--we found people who spoke French from underneath the stones-- (we are 20 "official" tour guides but not all speak French) took more than 1,350 Citroën employees from all over France, who have arrived on a cruise, to visit the island. Everything, absolutely everything (tips and drinks on the ship), are paid by the company. That's what I call REAL generosity towards its staff! I was dumbfounded. The group I took were extremely charming, listening with great attention to my silly stories. If some day I have a car, I think it will surely be a Citroën.
-----------------------------------------------------------------------------------------------------------
Crisis? What crisis? It seems that for Citroën France, it doesn't exist. Today, more than 30 guides--we found people who spoke French from underneath the stones-- (we are 20 "official" tour guides but not all speak French) took more than 1,350 Citroën employees from all over France, who have arrived on a cruise, to visit the island. Everything, absolutely everything (tips and drinks on the ship), are paid by the company. That's what I call REAL generosity towards its staff! I was dumbfounded. The group I took were extremely charming, listening with great attention to my silly stories. If some day I have a car, I think it will surely be a Citroën.
jueves, 10 de septiembre de 2009
UNA VISITA MISTERIOSA (2)
"A la mañana siguiente Miguel vio que los muchachos, en un arranque de humor, habían clavado en la puerta del cuarto donde aún dormía Tomás un cartelito que decía "Segundo año triunfal".
Tomás permaneció en la casa durante tres dias. No salía para nada a la calle. Les ayudaba a coger cangrejos y les preparó unos "oeufs brouillés" (huevos estrellados) maravillosos, pero María se negó a que siguiera haciendo de cocinero, en vista de los ingredientes que empleaba en sus guisos, en los cuales intervenían hasta las trufas, pronto los habría dejado sin una peseta.
Por la mañana del cuarto dia, Miguel vio que la puerta de la habitación de Tomás estaba abierta. Había desaparecido tan misteriosamente como vino.
El enigma quedó aclarado cuando, aquella misma mañana leyeron en los periódicos franceses que un comando español había atacado en el puerto de Bayona a los ocupantes de un submarino republicano. Sus tripulantes habían llevado el submarino español a Bayona y lo tenían atracado en el muelle. Un grupo de militares y de paisanos franquistas decidió rescatarlo a toda costa. Para ello, organizaron una expedición en la que indudablemente estaba incluido Tomás. El arriesgadísimo plan consistía en ir a Bayona, asaltar el submarino y sacarlo a la mar para devolverlo a España. Tomás, una vez pasada la frontera, debió de darse cuenta del peligro que entrañaba la empresa y sintió miedo. Logró escabullirse de sus compañeros para ir a esconderse en casa de los Zumeta, donde esperaría el resultado propicio o adverso de la audaz aventura. La empresa fracasó. Algunos de los atacantes consiguieron escapar, pero murió un hombre y varios fueron apresados y encarcelados por las autoridades francesas, que no admitían esta clase de actuaciones en su territorio.
Tomás murió en España muchos años despues, pero ni María ni Miguel lo volvieron a ver."
-------------------------------------------------------------------------------------------------------------
A MYSTERIOUS VISIT (2)
The following morning, Miguel saw that the young nationalists, in fun, had stuck a note on Tomás' bedroom door which said "Second triumphant year".
Tomás remained in the house for three days, in which he never set foot on the street. He helped them fish for crabs and cooked them delicious "oeufs brouillés" (scrambled eggs) but María refused to have him continue cooking because the ingredients he used, such as truffles, would soon leave them without a cent.
The morning of the fourth day, Miguel saw that Tomás' bedroom door was open. He had disappeared as mysteriously as he had appeared.
The enigma was solved when that same morning, they read in the French newspapers that a Spanish commando had attacked the crew of a Republican submarine, docked in Bayonne's harbour. A group of Franco's soldiers and civilians had decided to rescue the submarine and take it back to Spain. They organized an expedition to do this, in which Tomás was surely involved. The risky and daring plan was to go to Bayonne, assail the submarine and take it out to sea in order to return it to Spain. Tomás, once having crossed the border, realized how dangerous the mission was and, probably afraid of its outcome, managed to get away from the rest, and took refuge in Zumeta's house where he would await the, successful or adverse, result of the intrepid adventure. It failed. Some of the assailants managed to escape, one man died and various were jailed and taken prisoners by the French authorities who did not allow these actions to take place in their territory.
Tomás died in Spain many years later but neither María nor Miguel ever saw him again.
miércoles, 9 de septiembre de 2009
UNA VISITA MISTERIOSA
"Una mañana, cuando habían salido ya los chicos nacionalistas vascos que compartían la casa con María y Miguel, y mientras éstos desayunaban, llamaron a la puerta. Un joven alto, macizo, de cara sonriente y rotunda nariz gruesa ocupaba casi por completo el hueco de la puerta. Permanecía en silencio sin dejar de sonreir. María y Miguel lo conocían muy bien, pero les sorprendió su presencia allí, ya que, según sus noticias, el visitante estaba en muy buenas relaciones con la España de Franco.
--¡Tomás! ¿Qué haces aquí?--exclamó Miguel.
Con cierta timidez y embarazo, Tomás les rogó que le permitiesen alojarse en su casa dos o tres dias. La petición les extrañó, pero no pidieron explicaciones. Tampoco él las dio en ningún momento.
Tomás era lo que se llamaba entonces un "atorrante". Inteligente, alegre, juerguista, dispuesto a hacer cualquier favor a un amigo, pero dispuesto tambien a hacer una charranada al lucero del alba si sus necesidades lo requerían. Pero su simpatía le allanaba siempre el terreno.
María y Miguel le invitaron a compartir su desayuno. Le ofrecieron el cuarto libre que les quedaba, no sin antes advertirle de que en la casa pernoctaban unos nacionalistas vascos. Se rió. No le importaba, y suponía que tampoco les importaría a ellos cobijarse bajo el mismo tejado que él.
Llegada la noche, Miguel advirtió a los nacionalistas de la presencia del que podrían considerar como un enemigo, pero ellos se rieron a su vez, aunque tampoco ellos podían explicarse el motivo que había traido a Hendaya al nuevo huésped.
El encuentro de los dos jóvenes con Tomás, a pesar de lo enfrentado de sus posiciones, transcurrió sin el menor contratiempo, eludiéndose en todo momento cualquier referencia a la misteriosa presencia de Tomás en Francia." (Continuará)
-----------------------------------------------------------------------------------------------------------
A MYSTERIOUS VISIT
One morning, once the two Basque nationalists who shared the house with Miguel and María had left, and while they were having breakfast, there was a knock at the door. A young, tall, strong-nosed and hefty, smiling man, stood at the doorway, practically, covering the whole space. He kept smiling but remained silent. María and Miguel knew him very well but they were surprised by his presence as it was well known he was very much pro-Franco's Spain.
--Tomás! What are you doing here?--Miguel asked.
Although a bit embarrassed, he sheepishly pleaded them to let him stay for two or three days. This request surprised María and Miguel but they didn't ask any questions. He didn't give any answers either.
Tomás was a happy-go-lucky type of man, intelligent, fun, ready to do any favour to a friend but also ready to do whatever was necessary if need be. His charm always eased the way.
María and Miguel invited him to share their breakfast. They offered him the empty room that was available; warning him that in the house also slept the two Basque nationalists. He laughed. He didn't mind and he supposed they wouldn't either to be under the same roof.
At night, Miguel warned the nationalists about the presence of this man who they could consider an enemy. They also laughed but couldn't fathom either what had brought the new lodger to Hendaye.
The meeting of the two young men with Tomás, even though their ideas were so confronted, went smoothly. Avoiding, always, any reference to Tomás' mysterious presence in France. (It will continue)
lunes, 7 de septiembre de 2009
DISPARAD CONTRA LA ILUSTRACIÓN
Acabo de leer el excelente artículo de Rafael Argullol en "El País" de hoy, que me ha hecho llorar. A mares. Os lo recomiendo. Empieza con "En los últimos tiempos, algunos de los mejores profesores abandonan precipitadamente la Universidad acogiéndose a jubilaciones anticipadas. Con pocas excepciones, las causas acaban concretándose en dos: el desinterés intelectual de los estudiantes y la progresiva asfixia burocrática de la vida universitaria."
Y acaba: "La sociedad en la que vivimos no solo no tiene intención de compartir los ideales ilustrados, juzgados ilusorios e inservibles, sino que dispara contra ellos siempre que puede. Desde el escaño, desde la pantalla, desde el estudio, desde donde sea. El pensamiento ilustrado no ha demostrado que proporcionara la "felicidad" (el entrecomillado es mío). Y esto se paga".
Se lo dedico a mis queridos PEDRO OJEDA ESCUDERO y a RAÚL URBINA y a todos los profesores de humanidades.
---------------------------------------------------------------------------------------------------------
SHOOT AGAINST THE ENLIGHTENMENT
I just read a marvellous article written by Rafael Argullol (a prestigious Spanish writer/scholar) in our national newspaper "El País" which has made me cry... rivers. I recommend its reading to my bloggers. It starts with: "Lately, some of the best university professors rush to abandon it and apply for early retirement. With few exceptions, the reasons are two: the lack of students' intellectual interest and the progressive financial bureaucratic strangling of university life."
It ends with: "The society in which we live, not only does not want to share the "Enlightenment" ideals, judged to be illusory and useless, but it shoots against them constantly. From parliament, from TV and movie screens, from studies, from wherever.
The "Enlightenment" thought hasn't proven to provide "happiness". And this, you pay for".
I dedicate this post to my dear bloggers, both university literature professors, PEDRO OJEDA ESCUDERO and RAÚL URBINA and to all who teach humanities.
Y acaba: "La sociedad en la que vivimos no solo no tiene intención de compartir los ideales ilustrados, juzgados ilusorios e inservibles, sino que dispara contra ellos siempre que puede. Desde el escaño, desde la pantalla, desde el estudio, desde donde sea. El pensamiento ilustrado no ha demostrado que proporcionara la "felicidad" (el entrecomillado es mío). Y esto se paga".
Se lo dedico a mis queridos PEDRO OJEDA ESCUDERO y a RAÚL URBINA y a todos los profesores de humanidades.
---------------------------------------------------------------------------------------------------------
SHOOT AGAINST THE ENLIGHTENMENT
I just read a marvellous article written by Rafael Argullol (a prestigious Spanish writer/scholar) in our national newspaper "El País" which has made me cry... rivers. I recommend its reading to my bloggers. It starts with: "Lately, some of the best university professors rush to abandon it and apply for early retirement. With few exceptions, the reasons are two: the lack of students' intellectual interest and the progressive financial bureaucratic strangling of university life."
It ends with: "The society in which we live, not only does not want to share the "Enlightenment" ideals, judged to be illusory and useless, but it shoots against them constantly. From parliament, from TV and movie screens, from studies, from wherever.
The "Enlightenment" thought hasn't proven to provide "happiness". And this, you pay for".
I dedicate this post to my dear bloggers, both university literature professors, PEDRO OJEDA ESCUDERO and RAÚL URBINA and to all who teach humanities.
domingo, 6 de septiembre de 2009
DE NUEVO EN HENDAYA (6) Y FIN DE ESTE CAPÍTULO
ESTUARIO DEL BIDASOA - ESTUARY OF THE BIDASOA RIVER
"Entre los que todavía permanecían en Hendaya, quedaba una familia emparentada con Miguel. En realidad, se trataba de varias familias que ocupaban una hermosa casa visible desde la carretera. Estaba situada en una altura, y, entre los frondosos árboles del jardín que la rodeaban, asomaban sus blancos ventanales que miraban hacia Fuenterrabía, con el estuario del Bidasoa delante; al fondo, como un biombo, el monte Jaizkibel protegía a la ciudad de las furias del mar.
Algunos miembros de esa familia estaban bloqueados en Madrid, y, según las noticias que de vez en cuando llegaban, lo estaban pasando muy mal.
Todos los domingos, María y Miguel comían invitados en aquella casa. La "douairière" (vieja dama) de aquella pequeña corte en el exilio--una señora bondadosa y de enorme generosidad--(Nota mia: seguro que era la madre de Miguel, mi bisabuela María...) reía complacida ante el apetito que Miguel mostraba en aquellas ocasiones. Éste se resarcia cada domingo de los carramarros ingeridos durante toda la semana.
Las señoritas Urruticoerrota ya no estaban en Hendaya. Un sobrino de Bilbao había venido a por ellas. Se resistieron tenazmente, pero en vista de que los esperados "contraataques" no acababan de producirse, se resignaron al fin a regresar a España.
Miguel observó cierta transformación en los amigos y conocidos que hasta entonces se habían negado a hacer gestiones para pasar la frontera. Los entusiasmos políticos de meses antes se habían apagado; la firme determinación de no pisar España mientras en ella estuviera Franco se había debilitado de manera sensible.
Una tarde, mientras paseaban cerca de la playa, oyeron estallidos de cohetes y un jubiloso volteo de campanas. La orilla se llenó pronto de gente que miraba hacia Fuenterrabía, de donde partía el alboroto. Alguien gritó "¡Ya ha caido Covadonga!", y Miguel vio con asombro a algunos izquierdistas furibundos, tremendamente intransigentes, aplaudir con entusiasmo, al tiempo que se decían unos a otros:
--Esto va a acabar pronto y podremos marcharnos a casa.
Estaban ya hartos de tantas privaciones y molestias. Además, una vez decayeron la excitación y las emociones de los primeros dias del conflicto, se aburrían a morir. Echaban mucho de menos a tantos compañeros y parientes que habían quedado al otro lado. Los de Irún añoraban sus paseos por Ibarla o por las faldas del Jaizkibel, sus madrugadas de caza en las marismas de Playaundi y las cazuelas de bacalao o de angulas que se preparaban en las sociedades, en medio de un distendido ambiente de optimismo."
------------------------------------------------------------------------------------------------------------
BACK IN HENDAYE (6) AND END OF THIS CHAPTER
Some of Miguel's relatives were among the persons who still lived in Hendaye. Actually, they were several families who lived in a beautiful huge house that one could see from the road. It was on a hilltop, surrounded by a garden full of lovely leafy trees and from which white-panelled windows one could see the estuary of the Bidasoa river and neighbouring Fuenterrabía in front. On the background, like a screen, was the Jaizkibel mountain which protected the city from the sea's fury.
Some members of these families were blocked in Madrid and, from the news they received, were having a very hard time.
Every Sunday, María and Miguel had lunch with them. The "douairière" (grand lady) of that peculiar court of exiles--a very benevolent and generous woman-- (My note: I think it must have been Miguel's mother, my great-grand-mother, María...) laughed heartily watching how Miguel enjoyed the meal. He took advantage from the crabs he had eaten during the whole week!
The Urruticoerreta sisters were no longer in Hendaye. One of their nephews came to fetch them and take them back to Bilbao. Although, they had resisted tenaciously, finally they gave up when they realized that their longed-for "counter-attacks" didn't occur... They ended up returning to Spain.
Miguel noticed quite a change in some persons who, until then, hadn't wanted to make any moves to cross the border. The political enthusiasm of a few months back had extinguished; the firm determination not to return while Franco was there, had weakened considerably.
One afternoon, while they were walking on the beach, they heard a great explosion of fire-crackers and church bells ringing wildly. Many people appeared on the beach to watch the riot coming from the Spanish side. Someone shouted: "Covadonga has fallen!" (My note: a very important Republican position in Asturias)
Miguel, astonished, saw how several staunch and, very convinced, leftists applauded enthusiastically, at the same time saying to eachother:
---This is going to be finished soon and we can go back home.
They were tired, fed up with the discomfort and deprivations. Besides, once the excitement and emotions of the beginning of the conflict faded, life was very boring. They missed so many friends and relatives who had stayed on the other side. Those from Irún, longed for their walks through Ibarla or on the foothills of the Jaizkibel mountain, their early morning-hunts in the Playaundi marshes and the cod stews and eels that were cooked in the gastronomical societies, in relaxed, optimistic surroundings.
"Entre los que todavía permanecían en Hendaya, quedaba una familia emparentada con Miguel. En realidad, se trataba de varias familias que ocupaban una hermosa casa visible desde la carretera. Estaba situada en una altura, y, entre los frondosos árboles del jardín que la rodeaban, asomaban sus blancos ventanales que miraban hacia Fuenterrabía, con el estuario del Bidasoa delante; al fondo, como un biombo, el monte Jaizkibel protegía a la ciudad de las furias del mar.
Algunos miembros de esa familia estaban bloqueados en Madrid, y, según las noticias que de vez en cuando llegaban, lo estaban pasando muy mal.
Todos los domingos, María y Miguel comían invitados en aquella casa. La "douairière" (vieja dama) de aquella pequeña corte en el exilio--una señora bondadosa y de enorme generosidad--(Nota mia: seguro que era la madre de Miguel, mi bisabuela María...) reía complacida ante el apetito que Miguel mostraba en aquellas ocasiones. Éste se resarcia cada domingo de los carramarros ingeridos durante toda la semana.
Las señoritas Urruticoerrota ya no estaban en Hendaya. Un sobrino de Bilbao había venido a por ellas. Se resistieron tenazmente, pero en vista de que los esperados "contraataques" no acababan de producirse, se resignaron al fin a regresar a España.
Miguel observó cierta transformación en los amigos y conocidos que hasta entonces se habían negado a hacer gestiones para pasar la frontera. Los entusiasmos políticos de meses antes se habían apagado; la firme determinación de no pisar España mientras en ella estuviera Franco se había debilitado de manera sensible.
Una tarde, mientras paseaban cerca de la playa, oyeron estallidos de cohetes y un jubiloso volteo de campanas. La orilla se llenó pronto de gente que miraba hacia Fuenterrabía, de donde partía el alboroto. Alguien gritó "¡Ya ha caido Covadonga!", y Miguel vio con asombro a algunos izquierdistas furibundos, tremendamente intransigentes, aplaudir con entusiasmo, al tiempo que se decían unos a otros:
--Esto va a acabar pronto y podremos marcharnos a casa.
Estaban ya hartos de tantas privaciones y molestias. Además, una vez decayeron la excitación y las emociones de los primeros dias del conflicto, se aburrían a morir. Echaban mucho de menos a tantos compañeros y parientes que habían quedado al otro lado. Los de Irún añoraban sus paseos por Ibarla o por las faldas del Jaizkibel, sus madrugadas de caza en las marismas de Playaundi y las cazuelas de bacalao o de angulas que se preparaban en las sociedades, en medio de un distendido ambiente de optimismo."
------------------------------------------------------------------------------------------------------------
BACK IN HENDAYE (6) AND END OF THIS CHAPTER
Some of Miguel's relatives were among the persons who still lived in Hendaye. Actually, they were several families who lived in a beautiful huge house that one could see from the road. It was on a hilltop, surrounded by a garden full of lovely leafy trees and from which white-panelled windows one could see the estuary of the Bidasoa river and neighbouring Fuenterrabía in front. On the background, like a screen, was the Jaizkibel mountain which protected the city from the sea's fury.
Some members of these families were blocked in Madrid and, from the news they received, were having a very hard time.
Every Sunday, María and Miguel had lunch with them. The "douairière" (grand lady) of that peculiar court of exiles--a very benevolent and generous woman-- (My note: I think it must have been Miguel's mother, my great-grand-mother, María...) laughed heartily watching how Miguel enjoyed the meal. He took advantage from the crabs he had eaten during the whole week!
The Urruticoerreta sisters were no longer in Hendaye. One of their nephews came to fetch them and take them back to Bilbao. Although, they had resisted tenaciously, finally they gave up when they realized that their longed-for "counter-attacks" didn't occur... They ended up returning to Spain.
Miguel noticed quite a change in some persons who, until then, hadn't wanted to make any moves to cross the border. The political enthusiasm of a few months back had extinguished; the firm determination not to return while Franco was there, had weakened considerably.
One afternoon, while they were walking on the beach, they heard a great explosion of fire-crackers and church bells ringing wildly. Many people appeared on the beach to watch the riot coming from the Spanish side. Someone shouted: "Covadonga has fallen!" (My note: a very important Republican position in Asturias)
Miguel, astonished, saw how several staunch and, very convinced, leftists applauded enthusiastically, at the same time saying to eachother:
---This is going to be finished soon and we can go back home.
They were tired, fed up with the discomfort and deprivations. Besides, once the excitement and emotions of the beginning of the conflict faded, life was very boring. They missed so many friends and relatives who had stayed on the other side. Those from Irún, longed for their walks through Ibarla or on the foothills of the Jaizkibel mountain, their early morning-hunts in the Playaundi marshes and the cod stews and eels that were cooked in the gastronomical societies, in relaxed, optimistic surroundings.
sábado, 5 de septiembre de 2009
DE NUEVO EN HENDAYA (5)
CANGREJO - CRAB
"La casita estaba situada en la misma orilla de la bahía. Esta casa queda hoy bastante alejada del estuario, pues se han hecho grandes rellenos de tierra sobre los que se ha trazado una carretera. En la época de nuestra guerra, el chalet, de planta baja y un piso, tenía un pequeño patio con cuatro plátanos, cerrado por una tapia. Por la puerta abierta en la tapia, se accedía directamente al agua. Era una delicia poderse bañar desde casa y resultaba comodísimo salir a coger "carramarros" (cangrejos).
La afluencia de bañistas por el lado de la bahía solía ser, aún en verano, reducidísima, por lo que los carramarros vivían allí a sus anchas y se multiplicaban rápida y alegremente. María provista de un colador de cocina, salía al patio de los plátanos, descorría el grueso cerrojo de la puerta que daba a la bahía y, tras depositar los zapatos sobre la tapia, se metía en el agua, que, en marea alta, llegaba hasta la puerta. El declive de la orilla era suavísimo, de forma que María podía avanzar muchísimos metros sobre un suelo de arena y con el agua hasta las rodillas.
Observando el fondo, donde se formaban minúsculas ondas azules sobre la arena rizada, veía correr los verdosos cangrejos. Algunos de ellos eran muy pequeños. María sumergía el colador y lo sacaba lleno de agua y arena, en la que se debatían los carramarros. El agua y la arena se deslizaban a través de los agujeros, y pronto no quedaban más que los crustáceos, que se esforzaban por escapar (Nota mia: qué alegoría de la situación de los exiliados...). María devolvía al agua las piezas más pequeñas y metía las demás en un saco de hule. Luego en un cazo de la cocina, ponía los cangrejos a hervir, hasta que adquirían un tono rojo brillante, de laca japonesa. Miguel y María no habían comido jamás, ni volverían a comer, tantos carramarros como comieron aquella temporada.
Cuando las aguas se retiraban, quedaba entre Francia y España una llanada fangosa salpicada por cientos de pequeños charcos en los que se reflejaba el cielo y donde muchos hombres y mujeres, con la cintura doblada y los pantalones o las faldas recogidos hasta más arriba de las rodillas, se afanaban buscando almejas. Por el centro de esta llanada discurría el Bidasoa como por una carretera." (Continuará)
--------------------------------------------------------------------------------------------------------
BACK IN HENDAYE (5)
The house was right by the Bay. Nowadays, this house is quite far from it since they filled the land and built a road. In those times, the one-floor villa had a small patio with four plane trees, closed by a garden wall. Through the open door of the wall, one went directly into the water. It was such a pleasure to go swimming right from the house! And very easy to fish for crabs.
Not many swimmers went, even in summer, to swim in the Bay. Therefore, crabs thrived, happily reproducing themselves. María taking a sieve from the kitchen went out into the patio, opened the heavy door latch that faced the bay, left her shoes on top of the wall and went into the water (which in high tide reached the door). She walked quite a few metres over the sandy bottom, with the water up to her knees. Through the sand she could see the green crabs scurrying back and forth. Some of them were quite small. María dipped the sieve, pulled it out full of sand and water and the crabs fighting to escape (My note: quite an allegory of the exiles' situation...). María put the smallest crabs back into the sea and the other ones in a plastic bag.
Later she boiled them until they were a bright red. Miguel and Maria never ate, nor would they do so ever again, so many crabs as in those years!
In low tide, between France and Spain, was a long, wide muddy strip full of puddles where many women and men with their trousers and skirts pulled up above their knees, and their backs bent, fished for clams. Through the centre of this wide strip, ran the Bidasoa river as if it was a road. (It will continue)
"La casita estaba situada en la misma orilla de la bahía. Esta casa queda hoy bastante alejada del estuario, pues se han hecho grandes rellenos de tierra sobre los que se ha trazado una carretera. En la época de nuestra guerra, el chalet, de planta baja y un piso, tenía un pequeño patio con cuatro plátanos, cerrado por una tapia. Por la puerta abierta en la tapia, se accedía directamente al agua. Era una delicia poderse bañar desde casa y resultaba comodísimo salir a coger "carramarros" (cangrejos).
La afluencia de bañistas por el lado de la bahía solía ser, aún en verano, reducidísima, por lo que los carramarros vivían allí a sus anchas y se multiplicaban rápida y alegremente. María provista de un colador de cocina, salía al patio de los plátanos, descorría el grueso cerrojo de la puerta que daba a la bahía y, tras depositar los zapatos sobre la tapia, se metía en el agua, que, en marea alta, llegaba hasta la puerta. El declive de la orilla era suavísimo, de forma que María podía avanzar muchísimos metros sobre un suelo de arena y con el agua hasta las rodillas.
Observando el fondo, donde se formaban minúsculas ondas azules sobre la arena rizada, veía correr los verdosos cangrejos. Algunos de ellos eran muy pequeños. María sumergía el colador y lo sacaba lleno de agua y arena, en la que se debatían los carramarros. El agua y la arena se deslizaban a través de los agujeros, y pronto no quedaban más que los crustáceos, que se esforzaban por escapar (Nota mia: qué alegoría de la situación de los exiliados...). María devolvía al agua las piezas más pequeñas y metía las demás en un saco de hule. Luego en un cazo de la cocina, ponía los cangrejos a hervir, hasta que adquirían un tono rojo brillante, de laca japonesa. Miguel y María no habían comido jamás, ni volverían a comer, tantos carramarros como comieron aquella temporada.
Cuando las aguas se retiraban, quedaba entre Francia y España una llanada fangosa salpicada por cientos de pequeños charcos en los que se reflejaba el cielo y donde muchos hombres y mujeres, con la cintura doblada y los pantalones o las faldas recogidos hasta más arriba de las rodillas, se afanaban buscando almejas. Por el centro de esta llanada discurría el Bidasoa como por una carretera." (Continuará)
--------------------------------------------------------------------------------------------------------
BACK IN HENDAYE (5)
The house was right by the Bay. Nowadays, this house is quite far from it since they filled the land and built a road. In those times, the one-floor villa had a small patio with four plane trees, closed by a garden wall. Through the open door of the wall, one went directly into the water. It was such a pleasure to go swimming right from the house! And very easy to fish for crabs.
Not many swimmers went, even in summer, to swim in the Bay. Therefore, crabs thrived, happily reproducing themselves. María taking a sieve from the kitchen went out into the patio, opened the heavy door latch that faced the bay, left her shoes on top of the wall and went into the water (which in high tide reached the door). She walked quite a few metres over the sandy bottom, with the water up to her knees. Through the sand she could see the green crabs scurrying back and forth. Some of them were quite small. María dipped the sieve, pulled it out full of sand and water and the crabs fighting to escape (My note: quite an allegory of the exiles' situation...). María put the smallest crabs back into the sea and the other ones in a plastic bag.
Later she boiled them until they were a bright red. Miguel and Maria never ate, nor would they do so ever again, so many crabs as in those years!
In low tide, between France and Spain, was a long, wide muddy strip full of puddles where many women and men with their trousers and skirts pulled up above their knees, and their backs bent, fished for clams. Through the centre of this wide strip, ran the Bidasoa river as if it was a road. (It will continue)
jueves, 3 de septiembre de 2009
DE NUEVO EN HENDAYA (4)
PATRULLA DE GUDARIS - BASQUE SOLDIERS
"Tambien había refugiados que tenían todavía familiares bloqueados en Madrid, Valencia, Andalucia y otros puntos de la península, aún en manos de los republicanos, y que esperaban el fin de las hostilidades para poder reunirse con los suyos.
La mayoría de los dirigentes vascos y sus seguidores se habían instalado en San Juan de Luz. En esa misma ciudad, Franco había organizado una especie de consulado en la villa Nachoenea. A pesar de no haber intervenido absolutamente en política, ciertas familias esperaban prudentemente en Francia hasta ver aclarado totalmente el panorama, temerosas de que algunas personas bien situadas junto al poder aprovechasen la ocasión para cobrarse represalias por asuntos que nada tenían que ver con la política.
Aquellos momentos de desorden eran terreno abonado para los envidiosos resueltos a vengarse de quienes les habían hecho sufrir con su talento o con sus riquezas. La calumnia y la denuncia funcionaron libremente. Incluso se dió el caso de un individuo que debía diez mil miserables pesetas y, para librarse de su acreedor, presentó contra éste una denuncia que lo llevó antel el pelotón de fusilamiento.
Cuando se vació la playa, María y Miguel pudieron alquilar un chalet cuya parte posterior daba a la bahía de Txingudi. Aunque los alquileres, fuera de la temporada de veraneo, eran muy reducidos, para aligerar el presupuesto cedieron una habitación a dos jóvenes nacionalistas vascos que habían luchado como gudaris en el frente de Bilbao. Solo venían a casa a dormir y eran pacíficos y muy simpáticos." (Continuará)
-------------------------------------------------------------------------------------------------------------
BACK IN HENDAYE (4)
There were also refugees who yet had relatives blocked in Madrid, Valencia, Andalucia and other parts of the Peninsula, which were still under Republican jurisdiction, and awaited the end of the hostilities in order to join them.
Most of the Basque leaders and their followers, had settled in St. Jean de Luz. In that same city, Franco had organized a sort of consulate in the "Nachoenea" Villa.
Even though certain families had not participated politically at all, they carefully waited in France until the ambience totally cleared, afraid that some well-situated people, in powerful circles, might take advantage of the situation and take revenge for incidents that didn't have anything to do with politics.
Those turbulent/confusing times were fertile ground for the envious, ready to take revenge on those who had made them "suffer" either because of their talent or wealth. Slander, libel and accusations were the usual fare. In one case a man who owed 10,000 miserable Pesetas, in order to get rid of his creditor, denounced him to the authorities, which led the latter to be shot at dawn.
When the summer holiday-makers left the Beach, María and Miguel rented a small villa which back yard faced the Txingudi Bay. Even though, after the season rental prices were lower, in order to lighten their budget, they sub-letted a room to two Basque soldiers ("gudaris"), who had fought in the Bilbao front, and only went to sleep. They were very peaceful and friendly. (It will continue)
La mayoría de los dirigentes vascos y sus seguidores se habían instalado en San Juan de Luz. En esa misma ciudad, Franco había organizado una especie de consulado en la villa Nachoenea. A pesar de no haber intervenido absolutamente en política, ciertas familias esperaban prudentemente en Francia hasta ver aclarado totalmente el panorama, temerosas de que algunas personas bien situadas junto al poder aprovechasen la ocasión para cobrarse represalias por asuntos que nada tenían que ver con la política.
Aquellos momentos de desorden eran terreno abonado para los envidiosos resueltos a vengarse de quienes les habían hecho sufrir con su talento o con sus riquezas. La calumnia y la denuncia funcionaron libremente. Incluso se dió el caso de un individuo que debía diez mil miserables pesetas y, para librarse de su acreedor, presentó contra éste una denuncia que lo llevó antel el pelotón de fusilamiento.
Cuando se vació la playa, María y Miguel pudieron alquilar un chalet cuya parte posterior daba a la bahía de Txingudi. Aunque los alquileres, fuera de la temporada de veraneo, eran muy reducidos, para aligerar el presupuesto cedieron una habitación a dos jóvenes nacionalistas vascos que habían luchado como gudaris en el frente de Bilbao. Solo venían a casa a dormir y eran pacíficos y muy simpáticos." (Continuará)
-------------------------------------------------------------------------------------------------------------
BACK IN HENDAYE (4)
There were also refugees who yet had relatives blocked in Madrid, Valencia, Andalucia and other parts of the Peninsula, which were still under Republican jurisdiction, and awaited the end of the hostilities in order to join them.
Most of the Basque leaders and their followers, had settled in St. Jean de Luz. In that same city, Franco had organized a sort of consulate in the "Nachoenea" Villa.
Even though certain families had not participated politically at all, they carefully waited in France until the ambience totally cleared, afraid that some well-situated people, in powerful circles, might take advantage of the situation and take revenge for incidents that didn't have anything to do with politics.
Those turbulent/confusing times were fertile ground for the envious, ready to take revenge on those who had made them "suffer" either because of their talent or wealth. Slander, libel and accusations were the usual fare. In one case a man who owed 10,000 miserable Pesetas, in order to get rid of his creditor, denounced him to the authorities, which led the latter to be shot at dawn.
When the summer holiday-makers left the Beach, María and Miguel rented a small villa which back yard faced the Txingudi Bay. Even though, after the season rental prices were lower, in order to lighten their budget, they sub-letted a room to two Basque soldiers ("gudaris"), who had fought in the Bilbao front, and only went to sleep. They were very peaceful and friendly. (It will continue)
martes, 1 de septiembre de 2009
DE NUEVO EN HENDAYA (3)
HENDAYA PLAYA - HENDAYE BEACH
"--¿Qué hacemos ahora?--se preguntaron.
Al menos la noche era serena y calurosa.
--Vamos hacia la playa--sugirió María--. Si no encontramos otra cosa, podremos dormir en la arena.
A Miguel le pareció buena la idea y se pusieron en marcha. La playa quedaba bastante lejos, pero la excitación producida por la bronca y la indignación que llevaban todavía dentro del cuerpo les daba suficiente energía para caminar.
Hendaya-Playa estaba a aquellas horas en completo silencio. Ni siquiera se oía el ruido de las olas. No había más luz que la de los faroles de las calles. Cuando se dirigían decididamente a la playa con idea de pasar allí la noche, pasaron cerca de un garaje iluminado. Se dirigieron allí. Un hombre trabajaba debajo de un coche. Cuando sintió que alguien se aproximaba, dejó su trabajo y salió algo alarmado. Le explicaron lo que les ocurría y le preguntaron si sabría de alguien que pudiera alquilarles una habitación. Precisamente aquella mañana había quedado libre uno de los tres cuartos que el garajista alquilaba en la planta alta del garaje. María y Miguel vieron el cielo abierto.
El cuarto era sencillísimo y encalado, pero muy limpio y ventilado. Aunque la habitación carecía de cocina, decidieron alojarse allí hasta encontrar algo mejor. Tenían un hornillo de alcohol donde podían cocer la leche y los huevos, y con lo que comprasen en la "épicerie" de enfrente podrían aguantar hasta que los veraneantes se marcharan.
El ambiente de Hendaya había cambiado mucho durante los últimos meses.
Los que nada tenían que temer de quienes en aquel momento dominaban casi toda España, habían regresado a sus casas y empezaban a recomponer sus vidas. Los izquierdistas iban perdiendo las esperanzas de ver el triunfo de su causa, pero aún quedaban en la frontera algunos que no lo daban todo por perdido." (Continuará)
---------------------------------------------------------------------------------------------------------
BACK IN HENDAYE (3)
--What do we do now?--they asked themselves.
At least the night was calm and warm.
--Let's go to the beach--María suggested--. If we don't find anything else we can always sleep on the sand.
Miguel thought it was a good idea; they decided to go ahead. The beach was quite far but the adrenaline they had accumulated, due to the argument they had had, and indignation they felt, gave them enough energy to walk briskly.
Hendaye-Beach was completely silent at that time. Not even the waves were heard. The only light came from the street-lamps. As they decidedly walked towards the beach, with the idea of spending the night, they passed by a garage that was lit. They went there. A man was working underneath a car. As he heard someone approaching, he stood up a bit alarmed. They explained to him what had happened and asked if he knew someone who could rent them a room. Precisely that same morning a room, out of three that he rented above the garage, had been emptied.
María and Miguel thanked their lucky star!
The room was white-washed, extremely simple, but very clean and well ventilated. Although it didn't have a kitchen, they decided to stay there until they found something better. They had a small portable alcohol stove where they could boil milk and eggs and with whatever they bought at the "épicerie", across the street, they could last until the summer holiday-makers left.
Hendaye's environment had changed a lot in the last months.
Those who didn't have anything to fear, from those who controlled practically all of Spain, had returned to their homes and were starting to reorganize their lives. The leftists were losing hope of seeing their cause triumph, however, on the border, there were still others who didn't give up so easily. (It will continue)
"--¿Qué hacemos ahora?--se preguntaron.
Al menos la noche era serena y calurosa.
--Vamos hacia la playa--sugirió María--. Si no encontramos otra cosa, podremos dormir en la arena.
A Miguel le pareció buena la idea y se pusieron en marcha. La playa quedaba bastante lejos, pero la excitación producida por la bronca y la indignación que llevaban todavía dentro del cuerpo les daba suficiente energía para caminar.
Hendaya-Playa estaba a aquellas horas en completo silencio. Ni siquiera se oía el ruido de las olas. No había más luz que la de los faroles de las calles. Cuando se dirigían decididamente a la playa con idea de pasar allí la noche, pasaron cerca de un garaje iluminado. Se dirigieron allí. Un hombre trabajaba debajo de un coche. Cuando sintió que alguien se aproximaba, dejó su trabajo y salió algo alarmado. Le explicaron lo que les ocurría y le preguntaron si sabría de alguien que pudiera alquilarles una habitación. Precisamente aquella mañana había quedado libre uno de los tres cuartos que el garajista alquilaba en la planta alta del garaje. María y Miguel vieron el cielo abierto.
El cuarto era sencillísimo y encalado, pero muy limpio y ventilado. Aunque la habitación carecía de cocina, decidieron alojarse allí hasta encontrar algo mejor. Tenían un hornillo de alcohol donde podían cocer la leche y los huevos, y con lo que comprasen en la "épicerie" de enfrente podrían aguantar hasta que los veraneantes se marcharan.
El ambiente de Hendaya había cambiado mucho durante los últimos meses.
Los que nada tenían que temer de quienes en aquel momento dominaban casi toda España, habían regresado a sus casas y empezaban a recomponer sus vidas. Los izquierdistas iban perdiendo las esperanzas de ver el triunfo de su causa, pero aún quedaban en la frontera algunos que no lo daban todo por perdido." (Continuará)
---------------------------------------------------------------------------------------------------------
BACK IN HENDAYE (3)
--What do we do now?--they asked themselves.
At least the night was calm and warm.
--Let's go to the beach--María suggested--. If we don't find anything else we can always sleep on the sand.
Miguel thought it was a good idea; they decided to go ahead. The beach was quite far but the adrenaline they had accumulated, due to the argument they had had, and indignation they felt, gave them enough energy to walk briskly.
Hendaye-Beach was completely silent at that time. Not even the waves were heard. The only light came from the street-lamps. As they decidedly walked towards the beach, with the idea of spending the night, they passed by a garage that was lit. They went there. A man was working underneath a car. As he heard someone approaching, he stood up a bit alarmed. They explained to him what had happened and asked if he knew someone who could rent them a room. Precisely that same morning a room, out of three that he rented above the garage, had been emptied.
María and Miguel thanked their lucky star!
The room was white-washed, extremely simple, but very clean and well ventilated. Although it didn't have a kitchen, they decided to stay there until they found something better. They had a small portable alcohol stove where they could boil milk and eggs and with whatever they bought at the "épicerie", across the street, they could last until the summer holiday-makers left.
Hendaye's environment had changed a lot in the last months.
Those who didn't have anything to fear, from those who controlled practically all of Spain, had returned to their homes and were starting to reorganize their lives. The leftists were losing hope of seeing their cause triumph, however, on the border, there were still others who didn't give up so easily. (It will continue)
Suscribirse a:
Entradas (Atom)