viernes, 24 de septiembre de 2010

DON QUIJOTE


Capítulo LXVIII- 2ª parte de nuestra lectura colectiva en el blog "La Acequia" de Pedro Ojeda Escudero (sin traducción al inglés).
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Chapter 68 - 2nd part of our joint reading in Pedro Ojeda Escudero's blog "La Acequia" (without an English translation).
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Tenemos a Quijo velando mientras Sancho duerme a pierna suelta "Yo velo cuando tú duermes, yo lloro cuando cantas, yo me desmayo de ayuno cuando tú estás perezoso y desalentado de puro harto. De buenos criados es conllevar las penas de sus señores y sentir sus sentimientos..." (aunque sea por las apariencias). Le dice que se levante y "...desvíate algún trecho de aquí..." para darse los "trescientos o cuatrocientos azotes a buena cuenta de los del desencanto de Dulcinea...". No quiere insistir para no llegar "...a los brazos, como la otra vez, porque sé que los tienes pesados. Después que te hayas dado, pasaremos lo que resta de la noche cantando...".

Sancho responde que "...no soy yo religioso para que desde la mitad de mi sueño me levante y me discipline, ni menos me parece que del extremo del dolor de los azotes se pueda pasar al de la música...". Le ruega que le deje seguir durmiendo.
"--¡Oh alma endurecida! ¡Oh escudero sin piedad! ¡Oh pan mal empleado y mercedes mal consideradas las que te he hecho y pienso de hacerte! Por mí te has visto gobernador y por mí te ves con esperanzas propincuas de ser conde..." Que no tardará en cumplirlo en cuanto pase el año de asueto "...post tenebras spero lucem".

Sancho no le entiende, solo sabe que el dormir es un gran placer y que iguala tanto "...al pastor con el rey y al simple con el discreto. Sola una cosa tiene mala el sueño, según he oído decir, y es que se parece a la muerte, pues de un dormido a un muerto hay muy poca diferencia." Quijo se sorprende de que hable "...tan elegantemente..." y quizá es verdad su refrán "No con quien naces, sino con quien paces". Sigue una retahíla de parte de Sancho sobre los refranes "...los de vuestra merced vendrán a tiempo y los míos a deshora; pero, en efecto, todos son refranes."

"En esto estaban, cuando sintieron un sordo estruendo y un áspero ruido... Levántose en pie don Quijote y puso mano a la espada, y Sancho se agazapó debajo del rucio... tan temblando de miedo como alborotado don Quijote." El ruido cada vez se oía más cercano. Resultó ser unos hombres que llevaban "...a vender a una feria más de seiscientos puercos". "Llegó de tropel la extendida y gruñidora piara, y sin tener respeto a la autoridad de don Quijote, ni a la de Sancho, pasaron por cima de los dos, deshaciendo las trincheas de Sancho y derribando no sólo a don Quijote, sino llevando por añadidura a Rocinante." (¡Pobres! ya están molidos una vez más...).

Sancho se levantó como mejor pudo "...y pidió a su amo la espada..." para matar a "...media docena de aquellos señores y descomedidos puercos...". Quijo le para los pies porque "...esta afrenta es pena de mi pecado, y justo castigo del cielo es que a un caballero andante vencido le coman adivas y le piquen avispas y le hollen puercos." (¡Qué depre está mi Quijo...!)
Sancho le dice "--También debe ser castigo del cielo que a los escuderos de los caballeros vencidos los puncen moscas, los coman piojos y les embista la hambre." Piensa que si los escuderos fueran hijos de los caballeros o parientes muy cercanos "...no fuera mucho que nos alcanzara la pena de sus culpas hasta la cuarta generación; pero ¿qué tienen que ver los Panzas con los Quijotes?...". Sugiere que se vuelvan a dormir "...lo poco que queda de la noche, y amanecerá Dios y medraremos."

Quijo le dice que duerma él porque "...naciste para dormir; que yo, que nací para velar...daré rienda suelta a mis pensamientos y los desfogaré en un madrigalete que, sin que tú lo sepas, anoche compuse en la memoria." Sancho piensa que esos pensamientos no dan para hacer coplas, pero que "...coplee cuanto quisiere, que yo dormiré cuanto pudiere." "...se acurrucó y durmió a sueño suelto, sin que fianzas, ni deudas, ni dolor alguno se lo estorbase." Quijo se arrima "...a un tronco de una haya o de un alcornoque (que Cide Hamete Benengelí no distingue el árbol que era)..." (vuelve a aparecer el Benengelí por si nos habíamos olvidado quién es el escritor de esta obra...).

"...al son de sus suspiros..." Quijo canta su madrigalete. "Cada verso de éstos acompañaba con muchos suspiros y no pocas lágrimas... cuyo corazón tenía traspasado con el dolor del vencimiento y con la ausencia de Dulcinea".

Sancho se despierta y ve el destrozo que "...habían hecho los puercos en su repostería y maldijo la piara...". Vuelven a sus jumentos y siguen su camino, pero al "...declinar de la tarde vieron que hacia ellos venían hasta diez hombres de a caballo y cuatro o cinco de a pie. Sobresaltose el corazón de don Quijote y azorose Sancho, porque la gente que se les llegaba traía lanzas y adargas y venía muy a punto de guerra."

Los hombres llegaron y "...arbolando las lanzas, sin hablar palabra alguna rodearon a Don Quijote y se las pusieron a las espaldas y pechos, amenazándole de muerte." Uno de ellos le hace señal de callarse y "...asió del freno de Rocinante y le sacó del camino, y los demás de a pie, antecogiendo Sancho y al rucio, guardando todos maravilloso silencio, siguieron los pasos del que llevaba a don Quijote..." Éste trata de preguntar "...adónde le llevaban o qué querían, pero apenas comenzaba a mover los labios, cuando se los iban a cerrar con los hierros de las lanzas; y a Sancho le acontecía lo mismo...". "Cerró la noche, apresuraron el paso, creció en los dos presos el miedo, y más cuando oyeron que de cuando en cuando les decían:
--¡Caminad, trogloditas!
--¡Callad, bárbaros!
--¡Pagad, antropofagos!
--¡No os quejeis, citas, ni abráis los ojos, Polifemos matadores, leones carniceros!"

"Sancho iba diciendo entre sí: "¿Nosotros tortolitas? ¿Nosotros barberos ni estropajos? ¿Nosotros perritas, a quien dicen "cita, cita"? No me contentan nada estos nombres: a mal viento va esta parva; todo el mal nos viene junto, como al perro los palos, ¡y ojalá parase en ellos lo que amenaza esta aventura tan desventurada!"

Al final llegan ¡al castillo de los odiosos duques! (Otra burla habemus...)

Seguiremos con el LXIX.

viernes, 17 de septiembre de 2010

DON QUIJOTE


Capítulo LXVII - 2ª parte de nuestra lectura colectiva en el blog "La Acequia" de Pedro Ojeda Escudero (sin traducción al inglés).
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Chapter 67 - 2nd part of our joint reading in Pedro Ojeda Escudero's blog "La Acequia" (without an English translation).
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Quijo en este capítulo quiere ser pastor. Mientras espera, recostado a la sombra de un árbol, la llegada de Sancho "...como moscas a la miel, le acudían y picaban pensamientos: unos iban al desencanto de Dulcinea y otros a la vida que había de hacer en su forzosa retirada."

En ésto llega Sancho alabando "...la liberal condición del lacayo Tosilos. -- ¿Es posible--le dijo don Quijote-- que todavía, ¡oh Sancho!, pienses que aquél sea verdadero lacayo?" Siguen unas disquisiciones sobre "Dulcinea convertida y transformada en labradora...el "Caballero de los Espejos" en el bachiller Carrasco, obras todas de los encantadores que me persiguen...". Luego quiere saber si le ha preguntado a Tosilos por Altisidora "¿...si ha llorado mi ausencia o si ha dejado ya en las manos del olvido los enamorados pensamientos que en mi presencia la fatigaban?".

Sancho le dice que no estaba en él "preguntar boberías". Se extraña de que ahora Quijo quiera "...inquirir pensamientos ajenos, especialmente amorosos...". Quijo diserta sobre "...las obras que se hacen por amor a las que se hacen por agradecimiento...". Un caballero puede ser "desamorado...pero no desagradecido". La prueba de que Altisidora le quiso bien es que le dió los "...tres tocadores (¡válgame todos los dioses! vuelven los tocadores...)...lloró en mi partida, maldíjome, vituperome, quejose, a despecho de la vergüenza, públicamente, señales todas de que me adoraba, que las iras de los amantes suelen parar en maldiciones". Él sabía que no le podía dar esperanzas (las tiene entragadas a Dulci) ni tesoros que ofrecerle porque "...los de los caballeros andantes son como los de los duendes aparentes y falsos...". Le reprocha una vez más que agravie a Dulci "...con la remisión que tienes en azotarte y en castigar esas carnes que vea yo comidas de lobos, que quieren guardarse antes para los gusanos que para el remedio de aquella pobre señora."

Sancho no comprende porque el azotarse las posaderas "...tenga que ver con los desencantos de los encantados, que es como si dijésemos: 'Si os duele la cabeza, untaos las rodillas'...". Le tranquiliza, no obstante, diciéndole que se azotará cuando le venga la real gana. Quijo le responde que así lo espera porque está en la obligación "...que te corre de ayudar a mi señora, que lo es tuya, pues tú eres mío." (Ejem...ejem...).

Siguieron con esas pláticas hasta que llegaron al lugar donde Quijo había sido arrollado por los toros "--Éste es el prado donde topamos a las bizarras pastoras y gallardos pastores que en él querían renovar e imitar a la pastoral Arcadia..." No se le ocurre otra cosa que decirle a Sancho que se conviertan en pastores "...Yo compraré algunas ovejas y todas las demás cosas que al pastoral ejercicio son necesarias, y llamándome yo "el pastor Quijótiz" y tú "el pastor Pancino" (me ha recordado a Al Pacino...) nos andaremos por los montes, por las selvas, por los prados..." Dibuja un escenario idílico donde cantarían, beberían "...los líquidos cristales de las fuentes...de los limpios arroyuelos o de los caudalosos ríos...". Comerían los frutos de las encinas, se sentarían en los troncos de los alcornoques, disfrutarían con la sombra de los sauces, "el olor de las rosas...". Piensa que eso les hará más famosos todavía "no sólo en los presentes, sino en los venideros siglos".

Sancho responde "--Pardiez, que me ha cuadrado, y aún esquinado, tal género de vida..." piensa que, si se enteran, también se apuntarían Sansón Carrasco, Nicolás el barbero "...y aun quiera Dios no le venga en voluntad al cura de entrar también en el aprisco...". Quijo se entusiasma y ya les otorga nombres a todos: el bachiller sería "el pastor Sansonino" o "el pastor Carrascón", el barbero "Niculoso" y el cura "el pastor Curiambroso". "Las pastoras de quien hemos de ser amantes, como entre peras podremos escoger sus nombres...". A su Dulci no hay que cambiarle porque le "cuadra así al de pastora como al de princesa...". Le dice a Sancho que a la suya le ponga el nombre que el quiera.

"No pienso ponerle otro alguno sino el de Teresona, que le vendrá bien con su gordura y con el propio que tiene, pues se llama Teresa...". Piensa que el cura "...no será bien que tenga pastora, por dar buen ejemplo; y si quisiere el bachiller tenerla, su alma en su palma."
Quijo sigue con sus fantasías, ahora, musicales (gaitas zamoranas, tamborines, sonajas, rabeles) incluyendo "los albogues" que Sancho no sabe qué son (ni yo tampoco...). Nos enteramos que son "...unas chapas a modo de candeleros de azófar, que dando una con otra por lo vacío y hueco hace un son, que, si no muy agradable ni armónico no descontenta y viene bien con la rusticidad de la gaita y del tamborín." Luego sigue una lección de las palabras de orígen "morisco" que existen en el castellano (almohaza, almorzar, alfombra, alguacil, alhucema, almacén, alcancía y las que acaban en "í": borceguí, zaquizamí, maravedí, alhelí, alfaquí).

Se imagina lo que harán todos brincando por esos prados: Como él es poeta, recitará poesías al igual que el bachiller Carrasco. El cura "...debe de tener sus puntas y collares de poeta..." tambien no duda del maese Nicolás "...porque todos o los más son guitarristas y copleros. Yo me quejaré de ausencia; tú te alabarás de firme enamorado; el pastor Carrascón, de desdeñado, y el cura Curiambro, de lo que él más puede servirse, y, así andará la cosa, que no haya más que desear."

Sancho más bien se ve como un gran cocinero "--¡Oh, qué polidas cuchares tengo de hacer cuando pastor me vea! ¡Qué de migas, qué de natas, qué de guirnaldas y qué de zarandajas pastoriles, que, puesto que no me granjeen fama de discreto, no dejarán de granjearme la de ingenioso! Sanchica mi hija nos llevará la comida al hato. Pero, ¡guarda!, que es de buen parecer, y hay pastores más maliciosos que simples, y no querría que fuese por lana y volviese trasquilada...". Sigue la retahíla refranera habitual. Quijo, como siempre, le para los píes refraneros y le dice que vaya al grano aunque sabe que eso "...es predicar en el desierto...". Sancho le dice que siempre le está "...reprehendiendo que no diga yo refranes, y ensártalos vuesa merced de dos en dos."

Quijo le dice que sus refranes vienen a cuento "...como anillo en el dedo, pero tráeslos tú tan por los cabellos, que los arrastras, y no los guías... y el refrán que no viene a propósito antes es disparate que sentencia."

Se retiran porque la noche acecha "...cenaron tarde y mal..." cosa que Sancho echa en falta y sueña con el castillo de los duques, la casa de don Diego de Miranda, las bodas de Camacho y la de don Antonio Moreno. Mientras Sancho duerme, Quijo vela.

Seguiremos con el LXVIII

jueves, 16 de septiembre de 2010

LAS RENTAS DE LA VIRGEN




(NOTA MIA: Os dejo con el último capítulo de la boda y mis entradas del Quijote. Me voy de viaje. Estaré unas dos semanas ausente de mi blog y de los vuestros.)
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(MY NOTE: I leave you with the last chapter of the wedding. I will be publishing only my "Don Quixote's" chapter resumés as I'm taking a trip and I shall be away for about two weeks.)
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"Al día siguiente se casó la hija del tejero. Los regalos que trajo Miguel, de parte de don Gabriel Rezola y de los señores de Bilbao, gustaron mucho en el pueblo: un juego de cama con embozos de encaje y letras bordadas; una docena de toallas; un delantal de hule para ir a lavar ropa; dos manteles de flecos con seis servilletas y un juego de café, con cenefa de oro brillante, para ponerlo en el chinero.

En la puerta de la iglesia, situada en lo más alto del pueblo, hubo mucha gente. La iglesia había sido incendiada por los rojos que dominaron la región, al igual que dominaran Candera, pero aquí no transcurrieron los acontecimientos tan pacíficamente como en el pueblo de Sierra Morena. Lo primero que se les ocurrió hacer en cuanto se enteraron de la sublevación de los militares fue sacar de una ermita cercana a una Virgen muy venerada, atar a ella al párroco de Huelgo y prenderles fuego, después de rociarlos con gasolina. Luego quemaron la iglesia.

El templo era más bien pequeño, pero de piedra bien labrada y de líneas muy puras. Las paredes, a pesar del incendio, se habían conservado limpias, pues los asaltantes hicieron la hoguera con las imágenes y los altares de madera en medio de la nave central, pavimentada en piedra, y el humo salió por las claraboyas cercanas a la bóveda sin manchar los muros.

El día de la boda de la hija del tejero, por la tarde, los novios obsequiaron a sus parientes e invitados con jamón y montañas de rosquillas, magdalenas, pestiños, polvorones y tocinos de cielo. La mayor parte de los dulces eran de fabricación casera, regalados a la novia por sus amigas. Las botellas de vinos andaluces y manchegos aparecían en la mesa con profusión, entre las bandejas de pastas y pasteles; pero sólo había doce vasos para los cincuenta o sesenta invitados (Nota mía: aún no se habían inventado los vasos de plástico...). María, disimuladamente, se abstenía de beber, mientras Miguel compartía su vaso únicamente con el joven Pepe Luis. La conversación se animaba alrededor de Miguel.

--Ya me he enterado de que aquí, durante la guerra, se hicieron verdaderas barbaridades--comentó--. ¡Miren que quemar al párroco atado a la Virgen!

--Sí. Es verdad. Fue una barbaridad, pero tantas o más se hicieron en el otro lado--dijo uno, mientras dejaba su vaso sobre la mesa--. Mire usted, el párroco, muerto está y no hay quien lo resucite, pero por la Virgen no se preocupe. Han puesto en el altar donde estaba una casi igual. Además, la Virgen no ha perdido nada. ¡Bien guardadito le ha quedado todo su dinero!

Le tuvieron que explicar a Miguel, lo que quería decir aquello. La Virgen de la ermita, como una señora cualquiera, tenía su patrimonio: olivares, un molino harinero en marcha y dos casas en el pueblo. En una de éstas, vivía el actual párroco de Huelgo, que era su administrador. El que contaba esto a Miguel, que era el fabricante de sifones del pueblo, añadió:
--¡Menuda vidorra se pega el párroco con las rentas de la Virgen!"

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THE VIRGIN'S PROPERTIES

The tile-maker's daughter married the following day. The gifts brought by Miguel, on behalf of don Gabriel Rezola and the gentlemen from Bilbao, caused quite a stir among the townsfolk: a set of embroidered sheets with embroidered initials; a dozen towels; a plastic apron for doing the laundry; two fringed tablecloths with six serviettes and a coffee set, bordered in shiny gold trim, destined for the china-cupboard.

Lots of people gathered at the church's entrance which was on the highest part of the town. The church had been burnt by the "reds" who dominated the area during the war, as well as they had done in Candera. However, things didn't go as peacefully here as they had in that village of the Morena Mountains. The first thing they did when they heard of the military's uprising, was to take out a very venerated Virgin of a closeby chapel, tie Huelgo's parish priest to the figure and set them on fire with gasoline. Aftewards, they burnt the church.

The temple was rather small, but made of very well-traced, pure-lined stones. The walls, despite the fire, had been preserved clean because the attackers had made the bonfire, with the images and the wooden altars, in the middle of the stone-paved nave, therefore, the smoke had filtered out, through the skylights near the vault, without staining the walls.

On the afternoon of the wedding day, the bride and groom showered their family and guests with ham and mountains of ring donuts, fairy cakes, honey-dipped fritters, shortbread biscuits, etc., mostly home-made and given, as a present, to the bride by her girlfriends. Andalusian and Castilian wines circulated generously, among trays of cookies and cakes; but there were only twelve glasses for the fifty or sixty guests (My note: they hadn't invented plastic glasses yet...). María, wisely, decided not to drink, while Miguel shared his glass only with the young Pepe Luis. Conversation perked up around Miguel.

--I found out that here, during the war, real atrocities took place--he said--. To burn the parish priest tied to the Virgin!

--Yes. It's true. It was horrendous, but more and worse things were committed by the other side--someone said, while leaving his glass on the table--. Look, the parish priest is dead and no one is going to bring him back to life, but don't worry about the Virgin. An almost exact copy has been placed on the altar where she was. Besides, the Virgin hasn't lost anything. Her money is well kept!

They had to explain to Miguel what that meant. The Virgin, like an ordinary human being, had her assets: olive groves, a flour mill which was functioning, and two houses in the village. In one of them lived the actual Huelgo's parish priest, who was the administrator. The person telling Miguel this, was the town's soda-water manufacturer, and he added:

--You can't imagine the life he leads with the Virgin's properties!

miércoles, 15 de septiembre de 2010

"VER LA CAMA"

"El tejero a quien fueron a visitar María y Miguel no empleaba el mismo ardid para zafarse de gastos de la boda de su hija. Antes de la ceremonia, fijada para el sábado siguiente, ya estaba llenando la despensa de la casa donde iba a vivir el nuevo matrimonio. La madre se lo explicaba a los Zumeta:

--Ya les hemos puesto todo. Patatas, lentejas, chorizos, tres cántaras de aceite, un jamón, una orza con lomo, un serón de higos pasos y cinco botes de miel.
--Por lo menos en una temporada, poco tendrá que comprar en la tienda nuestra Rita--añadió el padre.

Acto seguido, el tejero invitó a los Zumeta a que al día siguiente fueran "a ver la cama".

Cuando salieron a la calle, Miguel y María estaban desconcertados. No comprendían qué quería decir eso de "ver la cama", pero Pepe Luis les aclaró el enigma: cuando se trataba de una boda entre gente de ciertas pretensiones, en la casa donde iba a vivir el nuevo matrimonio se exhibía la cama.

Llenos de curiosidad por presenciar tan insólita costumbre, María y Miguel se dirigieron al día siguiente hacia la casa donde iba a morar la hija del tejero. Cuando llegaron, ya se había formado cola. La gente, silenciosa, subía a la casa, como si fuese a entrar en un templo. María y Miguel se colocaron en la fila aún en la calle. Subieron por las escaleras, lentamente, deteniéndose a veces para dejar pasar a los que bajaban. Luego siguieron por un pasillo hasta entrar en la habitación. El cuarto era reducido, pero tenía dos balcones. Las contraventanas estaban cerradas, y las cortinas de satén brillante, corridas. Solo una lámpara de bolo, colocada sobre la mesilla, iluminaba la estancia.

La cama era grande, de madera rojiza muy barnizada, con un alto copete de mucha talla, y, para que nada faltase, éste estaba rematado por una corona de conde. Los visitantes rodeaban la cama cubierta con una brillante colcha chinesca y permanecían un rato contemplándola. María y Miguel esperaban oir algún comentario jocoso, algún chiste malicioso..., pero nada de eso se produjo. Todos contemplaban la cama con la mayor seriedad y, despues de un rato, se marchaban sin pronunciar palabra."

(Nota mia: reconozco que la foto de la cama no hace justicia, a la que describe mi tía...)

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"SEE THE BED"

The tile-maker, that Miguel and María went to visit, didn't use those tricks in order not to spend on his daughter's wedding. Before the wedding, scheduled for the following Saturday, he was already stocking the larder of their new house. The mother explained to the Zumetas:

--We've given them everything. Potatoes, lentils, sausages, three jugs of olive oil, a leg of ham, a crock of pork loins, a crate of dried figs and five jars of honey.
-- Our Rita, at least, won't have to buy anything for quite a while--added the father.

Afterwards, the tile-maker invited the Zumetas to "see the bed" the following day.

Once on the street, Miguel and María, were puzzled. They didn't understand what "see the bed" was all about. However, Pepe Luis, cleared the enigma: when a wedding took place, among people with certain pretentions, it was common to show the bed of the new wedded couple.

Very curious to see this surprising and quaint tradition, the following day, María and Miguel went to the house where the couple would live. When they arrived, there was already a queue. The people, in silence, went in as if they were entering a temple. María and Miguel stood in the queue, on the street. They went up the steps, slowly, stopping from time to time to let pass, the people coming down. Afterwards, they went through a narrow corridor until they entered the bedroom. It was small but it had two balconies. The shutters were closed and the bright satin curtains drawn. Only a small round lamp on the bedside table, lit the room.

The bed, of a reddish, extremely varnished wood, was big. It had a very high bedtop, and, so as not to miss any detail, there was a posh crown crowning it all. It was covered with a shiny, chinese-like bedspread. The visitors went around it and stopped a moment to admire it. María and Miguel thought that someone would make a waggish comment or let out a facetious joke..., but nothing of the sort happened. They all looked at the bed very seriously and, after a while, left in the greatest silence.

(My note: the picture of the bed has nothing to do with the one my aunt describes...)





martes, 14 de septiembre de 2010

ECONOMÍAS NUPCIALES


"Al día siguiente, mientras Miguel trabajaba con Pepe Luis en la oficina, llegó Julián Relámpago.

--¿Ya saben? A la hermana de Plácido se la han llevado esta noche.

--¿Qué quiere decir eso?--preguntó Miguel.
Pepe Luis se sonrió y dijo:

--Pues, sencillamente, que se ha escapado con el novio... Pero no se preocupe, don Miguel. Dentro de pocos días aparecerán por aquí y los casará el cura, de madrugada. Es un truco que se emplea mucho por estas tierras, para no tener gastos de boda ni de invitados."

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THRIFTY WEDDING

The following day, while Miguel was working with Pepe Luis in the office, Julián Relámpago appeared.

--Have you heard? Plácido's sister eloped last night.

--What does that mean?--asked Miguel.
Pepe Luis smiled and said:

--Simply, that she has escaped with her boyfriend... But, don't worry, don Miguel. In a few days, they'll appear and the priest will marry them at dawn. It's a trick that many use around here, so as not to spend on a wedding and invitations.

domingo, 12 de septiembre de 2010

¡USAN PLATOS PARA COMER!



"Una vez se hubo marchado el médico santanderino, no sin antes dejar en orden lo concerniente al seguro de enfermedad, apareció Plácido, el chófer del camión. Llamaba la atención lo desastrado de su indumentaria. Para justificar el desaliño del chófer, Pepe Luis le dijo a Miguel:

--Este pobre Plácido está siempre sin una peseta. Su desgracia es que tiene una mujer muy pretenciosa y gastadora. ¡Figúrese usted cómo será, que en su casa hasta usan platos para comer!"

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THEY USE DISHES TO EAT!

Once the doctor from Santander left, having organized the health insurance matter, Plácido, the truck driver, appeared. His dishevelled looks and ragged clothes were very evident. In order to justify his appearance, Pepe Luis told Miguel:

--Poor Plácido, he's always without a cent. His tragedy is that he has a very pretentious and spendthrift wife. Imagine how she is that they even use dishes to eat!

viernes, 10 de septiembre de 2010

DON QUIJOTE



Capítulo LXVI - 2ª parte de nuestra lectura colectiva en el blog "La Acequia" de Pedro Ojeda Escudero (sin traducción al inglés).
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Chapter 66 - 2nd part of our joint reading in Pedro Ojeda Escudero's blog "La Acequia" (without an English translation).
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Siguen las maravillosas conversaciones entre Sancho y Quijo. Se marchan de Barcelona no sin antes indicar a Sancho donde ardió Troya "¡Aquí mi desdicha, y no mi cobardía, se llevó mis alcanzadas glorias... aquí se escurecieron mis hazañas, aquí finalmente cayó mi ventura para jamás levantarse!"

Sancho le consuela "--Tan de valiente corazones es, señor mío, tener sufrimiento en las desgracias como alegría en las prosperidades...Fortuna es una mujer borracha y antojadiza, y sobre todo ciega, y, así, no ve lo que hace, ni sabe a quién derriba ni a quién ensalza." Quijo le dice "--Muy filósofo estás, Sancho...muy a lo discreto hablas...". No sabe quién le ha enseñado pero lo que sí sabe es "...que cada uno es artífice de su ventura." Quijo achaca su desventura a que "... el poderoso grandor del caballo de la Blanca Luna no podía resistir la flaqueza de Rocinante... y, aunque perdí la honra, no perdí ni puedo perder la virtud de cumplir mi palabra."

Quijo dice que sigan caminando y tendrán en su tierra "...el año del noviciado con cuyo encerramiento cobraremos virtud nueva para volver al nunca de mí olvidado ejercicio de las armas." Sancho le responde que no está para grandes caminatas y mejor sería dejar "...estas armas colgadas de algún árbol, en lugar de un ahorcado..." Quijo está de acuerdo "...cuélguense mis armas por trofeo, y al pie de ellas o alrededor de ellas grabaremos en los árboles lo que en el trofeo de las armas de Roldán estaba escrito: Nadie las mueva, que estar no pueda, con Roldán a prueba".

Todo ésto le parecio de perlas a Sancho "...y si no fuera por la falta que para el camino nos había de hacer Rocinante, también fuera bien dejarle colgado." (¡Pobre Roci!) Quijo le dice que ni hablar "¡Pues ni él ni las armas quiero que se ahorquen, porque no se diga que a buen servicio, mal galardón!" Siguieron con éstas pláticas durante "...todo aquel día y aún otros cuatro, sin sucederles cosa que estorbase su camino...".

Al quinto dia se les apareció un labrador queriendo reparar un entuerto como en la época de Sancho el gobernador. Era uno que pesaba once arrobas corriendo contra otro que pesaba cinco. Sugieren que tendrían que correr con pesos iguales o sea, que el que pesaba cinco arrobas "...se pusiese seis de hierro a cuestas, y así se igualarían las once arrobas del flaco con las once del gordo". Sancho interviene con su sabiduría de la cual Quijo está feliz porque no está para esos asuntos "...yo no estoy para dar migas a un gato". Sancho sugiere que "...el gordo desafiador se escamonde, monde, entresaque, pula y atilde, y saque seis arrobas de sus carnes de aquí o de allí de su cuerpo...". Otro labrador le da la razón "...este señor ha hablado como un bendito y sentenciado como un canónigo...".

Todos llegan a un acuerdo de que es mejor que no corran y se vayan a la taberna "...de lo caro..." a disfrutar del vino. Quijo dice que él no se queda, se va adelante en su Roci. Otro labrador dice "--Si el criado es tan discreto, ¡cual debe ser el amo! Yo apostaré que si van a estudiar a Salamanca, que a un tris han de venir alcaldes de corte."

Sancho le alcanza y pasan la noche al raso y al descubierto. Al día siguiente "...siguiendo su camino, vieron que hacia ellos venía un hombre de a pie, con unas alforjas al cuello y una azcona o chuzo en la mano, propio talle de correo a pie...". Resultó ser ¡Tosilos el lacayo del odioso duque! "...¡qué gran contento ha de llegar al corazón de mi señor el duque cuando sepa que vuestra merced vuelve a su castillo, que todavía se está en él con mi señora la duquesa!" (sí, sí, ¡solo faltaba!). Les cuenta que al final no se casó con la hija de la dueña Rodríguez que ella ha acabado como monja y "Doña Rodríguez se ha vuelto a Castilla". Ahora se dirigía a Barcelona "...a llevar un pliego de cartas al virrey que le envía mi amo...". Tosilos les ofrece unos "llamativos" (queso de Tronchón, vino etc.). Sancho acepta enseguida y Quijo le dice " ...tú eres, Sancho, el mayor glotón del mundo y el mayor ignorante de la tierra...". Le dice que se quede con él pues no "...te persuades que este correo es encantado, y este Tosilos, contrahecho." El se irá "...adelante poco a poco, esperándote que vengas."

Sancho y Tosilos se quedan despabilando "...todo el repuesto de las alforjas, con tan buenos alientos, que lamieron el pliego de cartas, sólo porque olía a queso..." Tosilo le dice que su amo "...debe de ser un loco --¿Cómo debe?--respondió Sancho--. No debe nada a nadie, que todo lo paga, y más cuando la moneda es locura."

Tosilos le ruega que le cuente todo lo que ha acontecido pero Sancho le dice "...que era descortesía dejar que su amo le esperase, que otro día, si se encontrasen, habría lugar para ello... y diciendo "a Dios", dejó a Tosilos y alcanzó a su amo, que a la sombra de un árbol le estaba esperando."

Seguiremos con LXVII.

miércoles, 8 de septiembre de 2010

MUSEO DE DALÍ EN FIGUERES


Despues de nuestra visita a Girona, cogimos el tren de vuelta al pueblo (tuvimos que hacer transbordo en Maçanet). Al dia siguiente decidimos ir a Figueres (dos paradas despues de Girona) a ver el famoso museo... Vuelta al tren hasta Maçanet para hacer transbordo. Le dije a Cristina que era mala época para visitarlo porque habría colas kilométricas y que sería mejor ir en invierno. Pero ella tenía ilusión de visitarlo y, en el fondo, yo también. Para allá nos fuimos. Esta vez salimos temprano (10:00). Llegamos hacia las 12:00. Ese dia había un gran mercado en la plaza principal. Unas verduras y frutas maravillosas (sentí no haberme llevado el carrito de la compra...). Nos fuimos al museo. ¡COLA KILOMÉTRICA! Me negué hacerla porque ODIO hacer colas para ver un museo. Cristina se quedó y yo me senté tan ricamente en una terraza, tomando una caña, unas aceitunas y leyendo el periódico. Una hora despues, Cristina ya estaba cerca de la taquilla, entonces me incorporé a la cola (le invité a la entrada ya que, la pobre, se había sacrificado haciendo la cola...). A todo esto cuando estábamos a cuatro personas de la misma, una pareja de jetas españoles intentaron colarse. ¡La que se armó! La señora delante nuestro, les dijo que hicieran cola como todo el mundo, el chico la insultó y la amenazó con romperle las gafas a la salida, su chica también se puso borde (es que pensarían que todos eramos guiris y se llevaron la sorpresa de su vida al ver que eramos españoles). Yo les dije que eran unos maleducados, unos zafios y unos cretinos y que se fueran hacer la cola (sorprendentemente no me insultaron e hicieron mutis por el foro...sería que mi pelo blanco les infundó respeto...). No entendí tampoco como dos ignorantes como ellos quisieran visitar el museo...

Entramos. Era el metro en hora punta. Ibamos apiñados como sardinas (la mayoría rusos) viendo, más que nada, dibujos de Dalí, su famosa Mae West (sofá en forma de boca, dos cuadros como ojos y la nariz ya no me acuerdo de qué estaba hecha), un coche vintage con unas esculturas que estaba bien y unos cuadros de su hermana de espaldas (¡no la famosa de la ventana!) y UNO famoso de Gala sentada con un pecho al aire, que me gustaron. Lo demás me dejó fría la verdad (lo tendré que volver a ver con calma en invierno). Las masas me horrorizan y, el museo, estaba abarrotado. Así, yo no disfruto. Lo que sí me gustó fueron las joyas que ya las había visto en Toronto en los '60. Estaban en otro local y ahí, sí, había poca gente, o sea, se podían ver. PRECIOSAS. Luego nos enteramos de que se pueden ver las joyas sin necesidad de entrar en el museo principal y ahí ¡no había cola!

El conjunto entre el museo y el edificio kitsch rosa con los huevos en el tejado y panes en las paredes me pareció una americanada de Dalí. Se ve que cuando se hicieron ambos, él hacía mucho la pelota a los americanos, que eran, al fin y al cabo, sus mejores clientes. Todo está hecho a su medida. Por supuesto que sus mejores cuadros "El Cristo de Cadaqués" "El gran masturbador", "El reloj" en fin, sus primeros trabajos, que son los que valen la pena. NO se ven. Esos están en manos de coleccionistas privados. En este museo se ven las sobras.

(Despues del Quijote del viernes, continuaré con las aventuras de Pepe Luis y los mineros de Huelgo)

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DALI'S MUSEUM IN FIGUERES

After our visit to Girona, we took the train back to my village, changing trains in Maçanet. The following day we decided to go to Figueres (two stops away from Girona) to see the famous museum... Back to the train again and changing in Maçanet. I told Cristina that it wasn't a good time to go as, probably, there would be huge queues and that it would be better to visit it in winter. But she was keen to visit it and, deep down, so was I. So, there we went. This time we set out early (10:00 a.m.) and we arrived at noon. That day there was a marvellous vegetable and fruit market in the main square (I missed not having taken my shopping cart...). We went to the museum. HUGE QUEUE! I refused to stay because I HATE doing queues to visit museums. Cristina stayed and I sat in a terrace with a beer, olives and reading my newspaper. An hour later she was close to the box office and I joined her (I invited her to the entrance as she, poor woman, had sacrificed herself doing the queue...). On top of it all, when we were four people away from the box office, a "smarties" Spanish couple tried to sneak in. The woman in front of us told them to do the queue as we all did. The young man insulted her and threatened to break her glasses when she came out, the girl was also very rude (of course, they thought they could get away with it thinking we were all tourists, but we were Spanish...). I told them that they were very uneducated, uncouth, and cretins and to go back to the queue. Surprisingly, they didn't insult me and, meekly, left... maybe my white hair did the trick...) Anyway, I didn't understand why those two ignorants wanted to visit the museum in the first place...

We went in. It was like rush hour in the subway. We were packed like sardines (Russians, the majority) seeing, mostly, Dalí's drawings; the famous "Mae West": a mouth-shaped sofa with two frames as the eyes and the nose which I don't know what it was made from; a vintage car with some statues which was OK; some paintings of his sister but NOT the famous one of her looking out of a window and another of Gala (Dalí's wife) sitting on a chair showing one of her breasts, which I liked. The rest I didn't like at all. I think I'll have to see it in winter more calmly. I hate masses and the museum was absolutely full. I don't enjoy it that way. What I did like were the jewels that I had seen in Toronto in the 60's. They were in another building which wasn't so crowded. One could see them. They were BEAUTIFUL. We found out that one could see the jewels by themselves and there, there was no queue!

The compound, with the museum and the pink building with the eggs on the roof and breads on the wall, I found it to be very kitsch and geared to the American taste. When both buildings were built, you could see that Dalí was catering to the Americans as most of his art collectors were American. His best paintings "The Christ of Cadaqués" "The Great Onanist", "The Melting Watch", etc., i.e., his first great works of art, are NOT in this museum. They're in the hands of private collectors. Here, are the leftovers.

(After Friday's DON QUIXOTE, I'll continue with the adventures of Pepe Luis and the miners of Huelgo).

martes, 7 de septiembre de 2010

GERONA/GIRONA


Al dia siguiente nos fuimos a Gerona/Girona. La foto no le hace justicia porque hacia un sol de justicia (perdón por la redundancia...). ¡Un calor... ! Llegamos a la hora de comer y comimos en un restaurante de la parte antigua, excelente calidad/precio (lástima que no me acuerdo del nombre). Mientras engullíamos nuestro condumio (os dareis cuenta de que estoy..., muy quijotesca...), veíamos un trenecito turístico pasando cada cierto tiempo. Decidimos que nos montaríamos en él para evitarnos subir las cuestas a pie con ese sol de plomo. Dicho y hecho. Nos informamos que el trenecito tenía su parada en el "puente de piedra". Allá nos fuimos. Esperamos un rato y llegó "chú-chú-chú..." tocando su campanita. Nos subimos. Fue una ma-ra-vi-lla. Fuimos hasta la catedral (la única en España en cuatro estilos arquitectónicos: románica, gótica, renacentista y bárroca), pasando por la Colegiata de Sant Feliu, los "Jardines de la Francesa" (la dueña había sido francesa--me acordé de SELMITA...) con sus "acantos" (creo, pero no viene en la RAE) plantas que inspiraron los capiteles góticos. Pasamos por la "Zona de los alemanes" llamada así porque las tropas alemanas estuvieron ahí al final de la guerra. Vimos las torres de defensa, una de ellas abatida por Napoleón, que sigue igual--destruida. Bordeamos las murallas. En fin, un viajecito delicioso que jamás hubiésemos llegado a ver si hubiéramos ido por nuestra cuenta. Luego nos fuimos a pie por la Judería pero no llegamos hasta los baños árabes... Otra vez será.
Mañana os cuento sobre el Museo Dalí en Figueres...

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The following day we went to Girona (in Catalonian). "Gerona" in Castilian Spanish. The picture does not do it justice, as the day we went, the sun shone very brightly. It was VERY hot...! We arrived at lunch time. We had lunch in a very good restaurant of the old quarter. Excellent quality/price. As we ate, we noticed that a little tourist train went by every so often. We decided we would take it in order to avoid climbing on foot the steep hills, under that scorching sun. Said and done. We found out we had to take it on the "Stone Bridge". There we went. After a little while we heard the bell ringing and the "Choo-chooing" of the train approaching. We climbed up. It was wonderful! We went all the way up to the Cathedral (the only one in Spain with four architectural styles: Romanic, Gothic, Renaissance and Baroque); went by the Collegiate Church of Saint Feliu; by the "French Woman's Garden" (the owner had been French) with the special plants that inspired the Gothic spires; we went by the "German's Zone" called that way because German troops stayed there after the war. We saw the defence towers, one of them destroyed by Napoleon which still remains the same--a ruin. We bordered the walls. All in all, a delicious tour which we wouldn't have seen if we had gone on our own. Afterwards we walked through the Jewish Quarter but we didn't get to see the Arab Baths... Next time.
Tomorrow I'll tell you about the Dalí Museum in Figueres...

lunes, 6 de septiembre de 2010

VISITA A BARCELONA Y PELI DE WOODY ALLEN

Al dia siguiente de mi nefasta visita al Casal de la Gent Gran, nos fuimos a Barcelona a ver la última peli de Woody Allen "Encontrarás al hombre de tu vida". Me gustó. No te ries a carcajadas como en su anterior "Si la cosa funciona" que era tronchante, típica del Woody de su primera época, pero ésta la vi en ¡inglés! Cosa que me encantó y que no había hecho en años (en Ibiza todas están dobladas excepto las del círculo "Anem al cine". Las daban, tarde, en unos multicines alejados de mi casa y rara vez iba).

El papel de la viejita es genial. No me gustaron tanto el que hacía de escritor frustrado (parecía un camionero) y el de Antonio Banderas que parecía que se concentraba más en pronunciar bien el inglés que en interpretar su papel de dueño de una galería de arte. Anthony Hopkins está bien aunque creo que este tipo de papeles no le van (a veces veía su mirada de "El silencio de los corderos"...). Pero el conjunto me gustó. Mucho diálogo (como es norma en Woody) y situaciones reales como la vida misma.

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VISIT TO BARCELONA AND WOODY ALLEN'S LATEST FILM

The following day of my unfortunate visit (I say "unfortunate" because, deep down, it depressed me...) to the Oldies Home, we went to Barcelona to see Woody Allen's latest film "You Will Meet a Tall Dark Stranger". I liked it. It's not as hilarious as his previous film "If it Works" (I think that's the title in English) which was like Woody's earlier films. However, this one I saw it in English! And I was thrilled because I hadn't seen a movie in its vernacular language in many, many years. In Ibiza, except the "Let's go to the cinema" circle, everything is dubbed. The latter are shown late and quite far from my house so I, rarely, went.

The old lady is a gem. I didn't like the frustrated writer so much (he looked like a truck driver) and our Spanish Antonio Banderas, who seemed to be more concentrated on pronouncing his English well, than in his role as an Art Gallery owner. Anthony Hopkins is OK although I don't think this type of role suits him. (Sometimes I perceived his look of "The Silence of the Sheep"...). But I liked the total sum. Lots of dialogue (typical Woody) and real situations like life itself.

sábado, 4 de septiembre de 2010

CASAL DE LA GENT GRAN...

Hasta esta semana que vino una amiga de Ibiza (más joven y, por cierto, pintora y poetisa fantástica. Podeis ver su obra clickeando en Google poniendo: Cristina Ereñú), me había negado a entrar en ese edificio bello, moderno, luminoso, típico del nuevo diseño catalán. Me daba repelús admitir que era parte de la "gent gran..." (personas mayores, o sea, viejos). Pero entré con ella para enterarme de qué iba la cosa. Resulta que tienen montones de actividades muy interesantes: teatro, talleres de literatura, informática, encaje de bolillos, clases de inglés, viajes (el 16 de éste tienen una excursión maravillosa a Olot por 33€ con desayuno, comida y cena incluido. ¡Ah! y con opción a comprar pan hecho en horno de leña). Igual me apunto, no sé... Lo del teatro, literatura e informática me interesan. Lo del encaje de bolillos y el inglés no tanto... También ofrecen comidas por ¡4€! el menú, y peluquería por 7€. Igual, al fin y al cabo, mi pensión de, perdón, mierda, cunde para algo...

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OLDIES HOME

Until this week, that a younger friend of mine from Ibiza came to visit (by the way, a wonderful artist and poet, if you want to see her work click Google and write her name: Cristina Erenu), I had never entered the beautiful, modern, bright, typical Catalonian-designed building for the oldies. I didn't want to admit to myself that I was one of them... But I went in with her to find out what they had to offer. I was pleasantly surprised with all the activities they have: Theatre, Literature, Computers, Embroidery, English classes... Trips (on the 16th of this month they have an excursion to Olot (a beautiful village of the Costa Brava) for 33€ with breakfast, lunch and dinner included and with an option to buy wood-oven-baked bread...) I may take it, I don't know... I'm interested in the theatre, literature and computer courses (not so much the embroidery and English classes...). They also offer lunches for 4€! and hairdresser for 7€. Maybe my, excuse my language once again, shitty pension is worthwhile after all...

viernes, 3 de septiembre de 2010

DON QUIJOTE



Capítulo LXV - 2ª parte de nuestra lectura colectiva en el blog de Pedro Ojeda Escudero "La Acequia" (sin traducción al inglés).
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Chapter 65 - 2nd Part of our joint reading in Pedro Ojeda Escudero's blog "La Acequia" (without an English translation).
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Capítulo cortito éste donde nos enteramos de quién es "El Caballero de la Blanca Luna", nada más y nada menos que el ¡bachiller Sansón Carrasco!

Le cuenta a don Antonio que es del mismo lugar que nuestro Quijo y que ha venido a rescatarle "...cuya locura y sandez mueve a que le tengamos lástima todos cuantos le conocemos, y entre los que más se la han tenido he sido yo...". (Al final el tal Sansón Carrasco no parece tan mal tipo como lo parecía al principio...) Le cuenta como "...habrá tres meses que le salí al camino como caballero andante, llamándome el Caballero de los Espejos, con intención de pelear con él y vencerle sin hacerle daño...". Quería que volviera a casa pero en esta ocasión Quijo le venció "...me derribó del caballo, y, así, no tuvo efecto mi pensamiento: él prosiguió su camino, y yo me volví vencido, corrido y molido de la caída, que fué además peligrosa; pero no por esto se me quitó el deseo de volver a buscarle y a vencerle...". Le suplica que no le descubra a Quijo su identidad.

Don Antonio le promete que no le descubrirá pero le da pena que quiera "...volver cuerdo al más gracioso loco que hay en él..." No cree que se le pueda volver cuerdo a nuestro héroe porque está "rematadamente loco" pero desea, no obstante "...que nunca sane don Quijote, porque con su salud no solamente perdemos sus gracias, sino las de Sancho Panza su escudero, que cualquiera de ellas puede volver a alegrar a la misma melancolía." El Caballero de la Blanca Luna de despidió, hizo "...liar sus armas sobre un macho, luego al mismo punto, sobre el caballo con que entró en la batalla, se salió de la ciudad aquel mismo día...".

Don Antonio le cuenta al visorrey "...todo lo que Carrasco le había contado..." lo cual no recibió con mucho gusto "...porque en el recogimiento de Don Quijote se perdía el que podían tener todos aquellos que de sus locuras tuviesen noticia." (O sea, que no podían seguir con las "bromitas"...).

Mientras tanto nuestro Caballero de la Triste Figura ha estado seis días "...en el lecho, marrido, triste, pensativo y mal acondicionado..." Sancho trata de animarlo "--Señor mío, alce vuestra merced la cabeza y alégrese, si puede, y dé gracias al cielo que, ya que le derribó en la tierra, no salió con alguna costilla quebrada... volvámonos a nuestra casa y dejémonos de andar buscando aventuras por tierras y lugares que no sabemos..." Al fin y al cabo Sancho es el que sale "más perdidoso" porque aunque haya dejado de querer ser gobernador, no le importaría ser conde "...que jamás tendrá efecto si vuesa merced deja de ser rey... así vienen a volverse en humo mis esperanzas." "--Calla, Sancho, pues ves que mi reclusión y retirada no ha de pasar de un año, que luego volveré a mis honrados ejercicios, y no me ha de faltar reino que gane y algún condado que darte." (...qué iluso, pobret...)

A todo esto nos enteramos de que el renegado ha logrado liberar al travesti don Gregorio "¡Albricias, señor don Quijote, que don Gregorio y el renegado que fue por él está en la playa!" (Bueno, ya está en casa del visorrey). Quijo se alegra un poco porque hubiera preferido ser él que "...con la fuerza de mi brazo diera libertad no sólo a don Gregorio, sino a cuantos cristianos cautivos hay en Berbería...". (Cuitado, ahora se tendrá que dedicar más a usar la rueca en vez de la espada...).

Sancho le anima con unos cuantos de sus refranes "...viva la gallina, aunque con su pepita, que hoy por ti y mañana por mi, y en estas cosas de encuentros y porrazos no hay tomarles tiento alguno, pues el que hoy cae puede levantarse mañana... Levántese vuestra merced ahora para recibir a don Gregorio, que me parece que anda la gente alborotada y ya debe de estar en casa."

"...Deseoso don Gregorio de ver a Ana Félix, vino con el renegado a casa de don Antonio; y aunque don Gregorio cuando le sacaron de Argel fue con hábitos de mujer, en el barco los trocó por los de un cautivo que salió consigo...". Mostraba ser persona "codiciada, servida y estimada, porque era hermoso sobremanera, y la edad, al parecer de diez y siete o diez y ocho años. Ricote y su hija salieron a recibirle, el padre con lágrimas y la hija con honestidad." "No se abrazaron...porque donde hay mucho amor no suele haber demasiada desenvoltura." (¡Qué perspicaz era Cervan!)

Todos quedan embelesados con la belleza de ambos jóvenes y "...el silencio fue allí el que habló por los dos amantes y los ojos fueron las lenguas que descubrieron sus alegres y honestos pensamientos." (Qué bonito...).

Luego, tanto el renegado como don Gregorio, contaron sus peripecias salvadoras. Ricote les recompensa con dinero al renegado así como a los remeros. Éste se reconcilia con la Iglesia "...y de miembro podrido volvió limpio y sano con la penitencia y el arrepentimiento." Don Antonio trata de ver, a través de "enchufes" (el entrecomillado es mio), cómo puede solucionar "...que Ana Félix y su padre quedasen en España..." Ricote dice que NO. "No hay que esperar en favores ni en dádivas..." ya que es el mismo "conde de Salazar, a quien dio Su Majestad cargo de nuestra expulsión..." Sigue una velada, pero feroz, crítica a la expulsión de los moriscos.

De todas formas don Antonio lo va a seguir intentando. Acuerdan que don Gregorio vaya a ver a su padre, Ana Félix se quede con la esposa de don Antonio "....o en un monasterio" y Ricote con el visorrey. Llega el día de la partida de don Antonio, de don Gregorio y de nuestros héroes. "Hubo lágrimas, hubo suspiros, desmayos y sollozos al despedirse don Gregorio de Ana Félix."

"...y don Quijote y Sancho después, como se ha dicho: don Quijote, desarmado y de camino, Sancho, a pie, por ir el rucio cargado con las armas". (Sorry, en la foto le tengo sobre ruci).

Seguiremos con LXVI

miércoles, 1 de septiembre de 2010

UN MÉDICO CONFINADO EN HUELGO


"Otro asunto que había que arreglar era el del seguro de enfermedad de los mineros. Algunos de éstos, en cuanto empezaba el trabajo en los olivares, dejaban la mina porque ganaban más en las labores de la aceituna, pero en cuanto terminaban éstas, querían reintegrarse a su antiguo trabajo, lo cual ocasionaba abundantes problemas con el seguro de enfermedad y otras complicaciones.

--Esto hay que consultarlo con el médico--dijo Miguel.

Pepe Luis, que en ese momento miraba por la ventana hacia fuera, exclamó:
--¡Qué casualidad! Ahora mismo pasa por la calle don Ramón con su señora.

Miguel se asomó a la ventana. Vio a un hombre alto, de unos cuarenta años, complexión robusta y buen color, que bajaba por la calle empujando un cochecito donde dormía un niño muy pequeño. A su lado iba una mujer joven, de grandes ojos negros y pelo liso y brillante.

--Voy a bajar a decirle que tiene usted que hablar con él.
Pepe Luis bajó a la calle y subió al poco tiempo.
--Me ha dicho don Ramón que viene enseguida. Ha ido a dejar a su mujer y al niño en casa.

Al poco rato apareció el médico. Enseguida se dio cuenta Miguel de que no era del país. "Seguramente otro arrastrado por la resaca", pensó. En el curso de la conversación, se enteró de que era de Santander. No lo dijo claramente, pero dio a entender que estaba en Huelgo confinado.

--Y, ¿qué tal le va por aquí? ¿Se acostumbra a esto? --se atrevió Miguel a preguntar.

--Pues, mire usted: al principio, estaba desesperado, ¡es una mentalidad tan distinta a la nuestra! Pero he tenido la suerte de enamorarme, y eso ha sido mi salvación. Mi mujer, a pesar de tener veinte años menos que yo, está contentísima conmigo. ¡Exige tan poco la pobrecilla...!, y me acaba de dar un hijo. ¿Qué más puedo pedir?"

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A DOCTOR BANISHED IN HUELGO

Another matter that had to be solved was the miners' medical insurance. Some of them, as soon as the olive-picking season started, left the mine because they earned more, but when the season finished they wanted to retake their mining jobs, which caused many problems not only with the health insurance but other complications as well.

--We have to consult this with a doctor--Miguel said.

Pepe Luis who was looking out the window at that moment, exclaimed:
--What a coincidence! Don Ramón and his wife are walking on the street right now.

Miguel looked out. He saw a tall, forty-ish man with a robust good-coloured complexion walking down the street pushing a baby carriage, with a sleeping toddler inside. A young woman, with huge brown eyes and long, straight shiny hair walked by his side.

--I'm going down to tell him that you want to speak to him.
Pepe Luis went down to the street coming up shortly afterwards.
-- Don Ramón says he'll be here in a moment. He's taking his wife and child home.

Soon after, the doctor arrived. Miguel noticed that he wasn't Andalusian. "Surely another one drowned in the aftermath", he thought. In the course of the conversation, he found out he was from Santander (north of Spain). He didn't say it clearly but suggested that he had been banished to Huelgo.

-- And, how are you managing here? Are you getting used to it?-- Miguel dared ask.

--Well, at the beginning, I was desperate. It's such a different mentality to ours! But I've been lucky to fall in love and that has been my salvation. My wife, even though she's twenty years younger than I, is very happy with me. She asks for so little, the poor woman...! and she's given me a son. What more can I ask for?